La Secretaría de Gobernación (Segob) inició este miércoles el decomiso y destrucción de máquinas tragamonedas prohibidas por la ley, que se ubican en farmacias, tiendas de abarrotes, paraderos de autobús, mercados, entre otros establecimientos.
El objetivo es acotar espacios a la delincuencia organizada que, en la mayoría de los casos, opera en la instalación y uso de este tipo de máquinas, además de que representan una fuente de corrupción y adicción a los menores de edad que abre la puerta a la delincuencia.
La campaña dio inicio con un operativo en los municipios de Cuautitlán Izcalli, Tecámac y Villa Victoria, en el Estado de México en donde se calcula hay 20 mil máquinas tragamonedas. Autoridades federales y locales decomisaron 130 máquinas tragamonedas y clausuraron cuatro establecimientos que operaban bajo este giro.
En el operativo participaron autoridades de la Segob, la Policía Federal, de la Procuraduría General de la República, además del Gobierno del Estado y la Comisión de Prevención de Riesgos Sanitarios.
De acuerdo a las autoridades las máquinas fueron puestas a disposición del Fiscal Federal, quien continúa con la integración de la averiguación previa por la comisión del delito y llaman a dueños de tiendas, farmacias, panaderías o tortillerías para que eviten colocarlas ya que se les podría clausurar el establecimiento. El proyecto de alcance nacional se realiza en respuesta a la demanda de padres de familia para proteger a los menores de edad.
Con información de Impulso Guanajuato