MUNDO.- Si las elecciones en Estados Unidos fueran hoy, el presidente Donald Trump perdería en Texas, uno de los principales bastiones del Partido Republicano.
De acuerdo con una encuesta del diario The Dallas Morning News y la Universidad de Texas, el candidato demócrata tendría 46 por ciento de preferencia.
Mientras que el republicano tendría 41 por ciento.
Por su parte, 14 por ciento de los encuestados están indecisos.
Texas ha sido un estado afín a los candidatos republicanos.
En 2016, Donald Trump ganó en la entidad que colinda con México.
El caso de Biden es que los simpatizantes republicanos relajaron la búsqueda de apoyo de los independientes o indecisos, dijo Kenneth Bryant Jr, experto en ciencia política de la Universidad de Texas en Tyler, quien participó en el diseño de la encuesta.
“Mientras el presidente Trump goza todavía del apoyo universal de los republicanos y un rechazo desbordado de los demócratas, ha perdido mucho entre los de centro, que son quienes van a decidir quién gana Texas en noviembre.
Además, ayer el demócrata ganó las primarias en Puerto Rico para la candidatura demócrata.
El exvicepresidente se enfrentó a otros siete aspirantes en las boletas, aunque todos ya abandonaron la contienda.
Actualmente, Biden ya cuenta con los delegados suficientes para ser el nominado del partido.
Las primarias iban a realizarse en marzo pero fueron postergadas hasta ahora debido a la pandemia de coronavirus.
Los residentes de Puerto Rico son ciudadanos estadounidenses, pero no pueden votar en los comicios generales de noviembre.
De todas formas, tanto los demócratas como los republicanos invitan a delegados de ese territorio a sus respectivas convenciones políticas.
SE MOFA DE SEGUIDORES
HOUSTON.— El presidente Donald Trump criticó un muro fronterizo construido por una empresa particular en el sur de Texas que muestra signos de deterioro.
“Sólo se hizo para hacerme quedar mal’”, afirmó el presidente a pesar de que esa valla fue financiada por una empresa que recibe donaciones de seguidores republicanos.
La organización We Build the Wall (Nosotros Construimos el Muro) comenzó su campaña en diciembre de 2018 y ha recabado desde entonces 25 millones de dólares, mientras se promociona también como un grupo que respalda al mandatario republicano. La compañía que construyó el tramo cuestionado, Fisher Industries, ganó un contrato de mil 300 millones del gobierno federal para construir el muro fronterizo. Se trata de una valla de unos cinco kilómetros.
Con información de Excélsior / Foto: Reuters
