España.- Tras dos años de silencio, Iker Casillas, capitán del Real Madrid, concedió una entrevista para hablar de este par de años de crisis que ha sufrido en el equipo de toda su vida, esto de acuerdo con información del portal digital de Joaquín López Dóriga. Casillas aseguró que hace unos meses pensó en irse del Real Madrid, pero al final decidió quedarse a “luchar, renacer y competir”. Dijo que ahora está contento y piensa seguir en el equipo campeón de Europa.
Iker puntualizó que el momento más difícil fue cuando se lesionó la mano en enero de 2012, tras una patada accidental de su compañero Arbeloa con quien mantiene “discrepancias” desde tiempo atrás. El portero se sintió “aislado” porque el entrenador de entonces, José Mourinho, lo criticó en conferencias de prensa y porque el presidente, Florentino Pérez, se alejó del jugador. Indicó que a partir de ese momento su relación con Mourinho se congeló.
El guardameta también habló del esparcido rumor de que es él quien filtraba información a los medios durante la época del entrenador portugués y razón por la cual se le conoce con el sobrenombre de “Topo” por algunos sectores radicales de la afición. Ante esto, comentó que “topo, traidor, es injusto. Tengo una relación fluida con algunos periodistas porque los conozco desde hace muchísimos años, pero distingo la relación del amigo de la del periodista”. Iker está casado con la periodista Sara Carbonero.
Al portero de Móstoles le duelen los abucheos y silbidos de la afición en los últimos partidos de la actual Liga, sin embargo dice saber que su público es muy exigente. El jugador y capitán merengue también quiso explicar su llamada telefónica a Xavi y Puyol en 2011, hecho que aparentemente detonó su hasta entonces buena relación con Mourinho y que empezó sus dos años de calvario. Sobre esto, dijo que jamás les pidió perdón, sino que fueron conversaciones muy tensas en las que se dijo de todo con el fin de mejorar las relaciones de cara a la Eurocopa 2012, que ganó España.
Fuente: Lopezdoriga