Foto: Google MapsMÉXICO.- La caravana de migrantes, que el 23 de octubre salió de Tapachula, Chiapas, llegó ayer a la Ciudad de México y pasó la noche en la Casa del Peregrino.
Desde Puebla caminaron por la autopista y se enfrentaron con autoridades que en todo momento les impidieron subir a las plataformas de tráileres para viajar de aventón.
AUTORIDADES DE CDMX CIERRAN EL PASO A MIGRANTES
A su arribo a la Ciudad de México, migrantes de la caravana centroamericana agredieron con piedras y palos a policías capitalinos, quienes les cerraron el paso en la autopista México – Puebla, a la altura de Santa Martha Acatitla, en Iztapalapa.
Hubo varios heridos entre policías y migrantes.
En medio de la trifulca, un migrante cayó de una barda de más de cinco metros de altura, por lo que recibió asistencia por integrantes de una ambulancia.
La confrontación ocurrió luego de que los migrantes rechazaron el ofrecimiento de las autoridades de conducirlos al deportivo Santa Martha Acatitla, para pernoctar, ya que lo que los migrantes buscaban llegar a la Basílica de Guadalupe.
“Este espacio, este albergue, está dispuesto especialmente para atenderlos tenemos todas las medidas de higiene y seguridad”, dijo un funcionario del gobierno CDMX.
“No aceptamos ir al albergue, nosotros decidimos ir a la Basílica (…) queremos darle gracias a la Virgen de Guadalupe porque nos ha permitido estar en territorio mexicano”, señaló un migrante centroamericano.
A las ocho de la noche, integrantes de la caravana migrante liberaron los carriles centrales de la Calzada Ignacio Zaragoza y abordaron varios autobuses que los llevaron a la Basílica de Guadalupe. En todo momento estuvieron custodiados por elementos y unidades de la secretaria de seguridad ciudadana.
Posteriormente pasaron la noche en la Casa del Peregrino.
Con información de Noticieros Televisa / Carlos Guerrero
