Washington.- Un programa de interrogatorio usado por la CIA contra sospechosos de terrorismo tras los ataques de 2001 fue «mucho más brutal» de lo que la agencia informó y no logró obtener información que desbaratara amenazas, mostró un informe del Senado estadounidense dado a conocer este martes.
El reporte dijo que la CIA engañó a los políticos y al público respecto del programa, buena parte del cual fue desarrollado, operado y asesorado por dos contratistas externos, reporta Excélsior.
El informe se dio tras una investigación de cinco años de la Comisión de Inteligencia del Senado sobre el programa, que buscaba lograr información sobre la red al Qaeda y otros presos que estaban encarcelados en unidades de detención alrededor del mundo.
La CIA y muchos altos funcionarios gubernamentales de Estados Unidos han dicho que el programa era eficaz y que impidió varios complots terroristas.
El documento, que resume las 6 mil 300 páginas que tiene el informe en total, fue publicado hoy en medio de una gran expectación y ante el temor de que su divulgación pueda provocar protestas violentas en todo el mundo. Sólo se desclasificará el resumen, el resto del informe no se hará público.
El informe apunta que los métodos empleados para los interrogatorios equivalen a la tortura y señala que con ellos no sé consiguieron informaciones relevantes.
La administración Obama y los republicanos se encuentran divididos sobre la necesidad de hacer público el informe, dirigido por la presidenta del Comité de Inteligencia, la senadora demócrata Dianne Feinstein.
“Este informe no es serio ni constructivo», dijeron los senadores republicanos, quienes explicaron que votaron en contra de que se hiciera público porque «su difusión puede poner las vidas de estadunidenses en riesgo, ser usado para contribuir a la propaganda contra Estados Unidos por sus enemigos y dañará la política exterior estadounidense y los esfuerzos antierroristas».
Las fuerzas de seguridad han sido puestas en alerta a causa de ello en todo el mundo. El Pentágono ordenó a los comandantes que tomen medidas para la protección de los soldados y las instituciones militares, informó el portavoz del Departamento de Defensa, el coronel Steve Warren.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos condenó a Polonia en julio a indemnizar a dos presos de Guantánamo por secuestro y complicidad en las torturas sufridas en una cárcel secreta de la CIA que estaba en el noreste del país. El gobierno polaco siempre ha negado la existencia de este centro de detención en un ex cuartel militar. Las investigaciones que lleva a cabo la fiscalía al respecto, que se realizan desde hace años en secreto, fueron prolongadas una vez más en noviembre.