Ciudad de México.- Desde las primeras horas de este lunes elementos del Ejército mexicano tomaron la dirección de los Centros de Control Comando y Cómputo (C4) del estado, entre los que se encuentran Acapulco, Chilpancingo e Iguala, según se constató en la ciudad capital.
A partir de las 08:00 horas, un grupo de 50 militares sustituyeron a un grupo de 150 trabajadores, a quienes ya no se les permitió ingresar a realizar las labores que normalmente desarrollaban en distintas áreas del edificio ubicado a un costado de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Trabajadores dieron a conocer que desde el viernes de la semana pasada, acudieron elementos del Ejército para inspeccionar las instalaciones y solicitaron la información de qué actividades realizaba cada una de las personas adscritas a este centro, que depende de la Secretaría de Seguridad Pública.
En su mayoría mujeres, cuando intentaron ingresar las concentraron en el patio interior de las instalaciones, donde acompañadas por los militares solo ingresaron para recoger sus pertenencias personales.
En la puerta principal se observó a decenas de trabajadores retirar pertenencias, como ventiladores, mesas, libros y documentos, entre otros enseres de oficina.
Las primeras áreas que fueron desalojadas por las fuerzas castrenses son las correspondientes a los números de emergencia 066 y 086, así como el área de Monitoreo de Cámaras.
Hasta cerca de las 11:00 horas varios trabajadores permanecían al exterior de las oficinas, en espera de que sus jefes les dieran instrucciones, algunos se trasladaron a la Dirección General de Personal del Palacio de Gobierno, para conocer cuáles eran las indicaciones al respecto.
El pasado 2 de mayo se llevó a cabo una reunión en el puerto de Acapulco, en la que participó el gabinete de seguridad de Presidencia de la República y el gobernador Héctor Astudillo Flores, donde dieron a conocer que los C4 pasarían a manos del Ejército.
El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, informó que sería la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) quien a partir de esa misma semana, tomaría el mando de los Centros de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C-4) del estado, ubicados en Acapulco, Chilpancingo e Iguala, para lo cual serían destinados más de 400 efectivos.
Asimismo, dieron a conocer que se construirá un Centro de Coordinación, Comando, Control, Comunicaciones y Cómputo (C-5) para dar mayor apoyo tecnológico a la estrategia de seguridad.
En un comunicado, la Secretaría de Gobernación precisó que la Sedena se haría cargo completamente de las cámaras de seguridad distribuidas en Acapulco, y explicó que el C-4 es “un lugar que no ha dado confianza a todos los ciudadanos” cuando “es un lugar estratégico para poder enfrentar cualquier problema de inseguridad”.
El propio gobernador reconoció que en los últimos años las áreas de seguridad no han funcionado en la entidad, producto del abandono gubernamental, la falta de inversión y profesionalización del personal.
FUENTE: SDP Noticias
