Ante el Acuerdo de Certidumbre Tributaria anunciado por el Ejecutivo federal en febrero pasado, la secretaria de Salud, Mercedes Juan, refrendó el compromiso de esa dependencia con la estabilidad tributaria al no proponer cambios a los impuestos al tabaco.
La funcionaria federal explicó que México es uno de los países que más ha ampliado la carga fiscal a ese producto hasta llegar en la actualidad a un (OMITIR) 220 por ciento.
Detalló que se cuenta con un Impuesto Especial de Producción y Servicios (IEPS) al tabaco que consiste en una tasa “ad valorem” de 160 por ciento a la cajetilla de 20 cigarros.
Además un gravamen de 35 centavos por cigarro, es decir siete pesos por cajetilla, lo que representa un impuesto total del 220 por ciento sobre el precio de la cajetilla.
Refirió que esa tasa del IEPS al tabaco se incrementó sostenidamente en varios años desde 2001, pasando del 100 por ciento sobre el precio de venta a 160 por ciento en 2009.
Por otra parte, a partir del 2010, el Congreso de la Unión estableció una cuota fija por cigarrillo de cuatro centavos, es decir 80 centavos por cajetilla, y se incrementó a 35 centavos por cigarro, lo que representa siete pesos por cajetilla a partir de 2011.
“Los gravámenes vigentes convierten a México en uno de los países que más ha ampliado la carga fiscal a este nocivo producto a nivel internacional durante la última década”, apuntó.
Juan López enfatizó el liderazgo internacional que ha tenido el país en la lucha contra la adicción al tabaco, “pues está científicamente comprobado que su consumo provoca daños a la salud de la persona que fuma y de las personas cercanas que respiran el humo del tabaco”.
Asimismo, la titular de la Secretaría de Salud (SSA) recordó que ante el incremento de consumidores adolescentes se solicitó a la Comisión Nacional contra las Adicciones realizar una encuesta para tener evidencia científica y actualizada de este aumento en el consumo.
Señaló que esa información será para que “nos ayude a tomar las mejores decisiones y las políticas públicas de prevención de la salud en favor de los niños y adolescentes”, pues lamentablemente algunos inician a temprana edad el consumo del tabaco lo cual contrasta con lo que ocurría hace algunos años.
Por otro lado recordó que el objetivo de conmemorar anualmente el Día Mundial sin Tabaco, así como otras fechas vinculadas a temas de salud, es recordar a la comunidad mundial la importancia de acciones que se deben tomar en materia de prevención y sensibilizar sobre los daños que causa a la salud el consumo del tabaco.
Imagen: El Financiero