India.- El secuestro de varones para forzarlos a casarse es un fenómeno ha comenzado a extenderse un singular fenómeno que comienza a preocupar a las autoridades indúes y organizaciones civiles en pro de los derechos humanos, pues tan sólo en el 2017 el reporte de esta práctica sumó 3.404 casos
Aunque es un problema que afecta normalmente a las mujeres, las prácticas arcaicas de la pakdau vivah (secuestro para bodas, en el dialecto local de Bihar) y la jabaria shaadi (matrimonio forzado) en hombres están muy extendidas. La pobreza, unida a tradiciones como la dote que tiene que ofrecer la familia de la esposa y la desproporción de hombres con respecto a mujeres han magnificado este fenómeno al norte del país.
«Pakdau vivah está descontrolada en Bihar […] En la mayoría de los casos, los matrimonios se formalizan a punta de pistola o mediante amenazas de muerte a sus vidas y las de sus familias», declaró un oficial de la policía estatal a la prensa local el domingo.
Los casos se concentran al este de Uttar Pradesh, Estado en el que se encuentra el conocido Taj Mahal, y, sobre todo, el oeste del vecino Bihar. Ambas regiones sufren los peores índices de desarrollo socioeconómico del país: escasez de infraestructuras, pobreza rampante, bajos niveles de alfabetización y corrupción endémica abonan el terreno para el arraigo de vicios sociales como la discriminación por castas y las dotes matrimoniales.
El último informe de la Oficina Nacional de Investigación Criminal, de 2015, avala los datos ofrecidos por el Gobierno estatal. Según las estadísticas nacionales, Bihar es el Estado que más denuncias registra por secuestro de varones menores de 18 años. En 2015, el número de hombres de entre 18 y 30 años raptados en este estado fue de 1.096, lo que supone el 17% del total de secuestros de India.
La policía de Bihar dijo estar especialmente alerta para la siguiente temporada de bodas en India (lagan), que comienza en febrero. Este es el mes más propicio para los casamientos, según establece el calendario de superstición hindú para el este año.
Fuente El País