Los Ángeles, Estados Unidos.- Alrededor de tres mil feligreses, la mayoría mexicanos, rindieron hoy un tributo musical y una misa en honor a la Virgen de Guadalupe.
«Pedimos a la Virgen por la Diócesis de San Bernardino, por los que sufrieron pérdidas en los recientes incidentes de violencia y oramos porque tengan consuelo», expresó el arzobispo de Los Ángeles, José Gómez, al inicio de la misa.
El máximo líder de la Iglesia Católica en el condado de Los Ángeles también aprovechó para rogar a la Virgen y sin precisar «por los que no tienen libertad religiosa, que son perseguidos por su fe».
«También pedimos porque no haya más violencia y que los corazones afectados por el odio sean convertidos y les llegue la paz», añadió el arzobispo.
En la celebración, los feligreses entonaron las clásicas «Mañanitas», además de presenciar una serenata en donde varios artistas locales le cantaron a la santa patrona de los mexicanos.
En la parte principal de la catedral se colocó la imagen de la Virgen de Guadalupe rodeada de rosas rojas y a un costado la imagen de Juan Diego.
Así, desde el mariachi Los Reyes hasta Wendolyn Ayala, Claudia Fernanda, Jacky Ibarra y la banda de regional mexicana Los Ramones de Nuevo León le cantaron a la morenita del Tepeyac.
La festividad se llevó a cabo en la Catedral de Nuestra Señora de Los Ángeles, donde se presenciaron danzas aztecas y de matachines que inundaron el sitio con olor a incienso junto con sus tradicionales bailes.
Aquí, el arzobispo Gómez destacó la presencia en la catedral de la tilma, una parte de la pieza original del ayate de Juan Diego que fue obsequiado por la Basílica de Guadalupe, y «que esta aquí, lo que no existe en otra iglesia fuera de México», explicó.
Los Ángeles es donde reside el mayor número de mexicanos fuera de la Ciudad de México, lo que fue evidente en el servicio, aunque también había personas de origen asiático y anglosajón.
La celebración se prolongó por más de seis horas y cerca de la medianoche seguían llegando feligreses a pesar de que se registró un intenso frío, acompañado de fuertes vientos.




