MÉXICO.- Expertos en psicología descubrieron un nuevo trastorno denominado alucinación invertida y que afecta a un gran número de usuarios de teléfonos inteligentes.
De acuerdo con un estudio realizado por la Universidad de Derby, en Reino Unido, los celulares son los principales causantes de este trastorno psicológico
La investigación detalla que los usuarios de telefonía móvil están tan inmersos en sus celulares que van por la vida sin realmente tener conciencia de sus acciones o de lo que los rodea, es decir, una conciencia ilimitada de lo que está ocurriendo en tiempo real.
El estudio expone también que las alucinaciones invertidas no solo frenan el potencial humano y la calidad de vida, sino que también representan un riesgo para el bienestar de la población en todo el mundo, aumentando la obesidad y la adicción a las redes sociales.
El celular es uno de los aparatos más indispensables en la actualidad: el teléfono móvil, ese que recientemente se ha popularizado gracias a todas sus aplicaciones, incluidas la mensajería instantánea.
Es el celular, es aquel que corta distancias, mantiene informadas a las personas y literalmente los hace alucinar.
En entrevista con Paola Rojas, el neurocientífico Eduardo Calixto habló sobre este trastorno.
«Lo que vemos naturalmente es que hay unas regiones neuronales que se activan cuando nos llama la atención algo y poderosamente van sincronizando la activación de varias redes que van: entre poner atención, entre obtener memoria, entre tomar decisiones y cuando más tenemos el índice de estar analizando esta información (…) localizamos prácticamente nuestra atención en un marco de no más de 30 centímetros que nos hace prácticamente motivar nuestra vida, nuestro entorno, hacia ese punto y por consecuencia prácticamente disminuimos la atención de forma selectiva con respecto a lo que está pasando a nuestro alrededor».
Dijo que si el factor de lo que se está viendo es fundamental y cambia la memoria, para bien o para mal, esto hace que se cambie la neuroquímica del cerebro.
«Y prácticamente empezamos a dar datos de una atención sesgada y de que quiero volver a repetirlo. Lo que hace esto es que al cerebro le encanta tener el control de la cosas y por lo tanto en estas alucinaciones invertidas se sabe que hay un cambio en la actividad electroencefalográfia, es decir, las regiones del tálamo están activando tanto de tal manera que nos borramos de todo lo que está pasando alrededor y esto puede genera ya un trastorno porque nos puede prácticamente cambiar la realidad de lo que nos está sucediendo».
Sobre cómo detectar a alguien que ya padece de este trastorno, dijo:
«No hay manera de que haya una retroalimentación. Si cuando le dices ‘oye, fíjate que está pasando esto’ y te voltean y te dicen ‘sí’ y tú preguntas ‘sí qué’. Te contestó en forma espontánea, pero no sabe lo que está sucediendo, no hay retroalimentación, lo limitado de su proceso en el que está es que pudo haber pasado 40, 50 minutos, y para él fueron 5 minutos y en donde él dice ‘yo escuché esto o aquello’. El cerebro no puede poner atención a dos cosas al mismo tiempo con la misma magnitud».
Señaló que el primer factor es que la gente no pone atención y el segundo es que se le olvidan las cosas.
Indicó que este trastorno se puede revertir.
«Es ser consciente que ya nos está pasando, que ya está afectando. Es ser consciente de que esto nos está limitando en el trabajo, en la escuela y también en la convivencia. Segundo, limitando. Nos estamos dando cuenta que el factor es: si tú disminuyes la atención al teléfono, por lo menos entre las 10 de la mañana y las 2 de la tarde que es donde más se identifica que se engancha uno (…) y evidentemente en la noche después de las 8 de la noche, si se va limitando el factor ya en forma trabajada con una terapia es posible disminuirlo».
El experto agregó que también se debe ofrecer alternativas de poner atención en otras cosas, como: hacer ejercicio, leer un libro y tener mayor contacto con las personas que están a su alrededor.
«Esto lo hacen las personas que no tienen comunicación abierta, son aquellos que han sido aislados poco a poco y que es una manera de salir de ese marasmo en el que la sociedad los ha dejado afuera».
Con información de «Al aire con Paola»