En 1968, México se convirtió en el primer país de América Latina en ser sede de unos Juegos Olímpicos, las XIX Olimpiadas. Para garantizar la seguridad de los Juegos Olímpicos, el presidente Gustavo Díaz Ordaz ordenó la creación del Batallón Olimpia, integrado por al menos mil 500 elementos de diferentes instituciones, entre ellas el Estado Mayor Presidencial, la Dirección Federal de Seguridad, la Policía Judicial Federal y la Policía Judicial del entonces Distrito Federal.
A unos días de celebrarse las Olimpiadas de México 68, la atmósfera en el país era tensa debido a las protestas estudiantiles, que surgieron por un conflicto entre alumnos de escuelas vecinas, ubicadas en el primer cuadro de la capital del país.
Por esta situación, el Gobierno mexicano envió a un grupo de granaderos que se extralimitó en sus funciones, durante un violento desalojo en el Zócalo, el 27 de agosto del mismo año.
En el contexto de represión y abuso de poder, el 13 de septiembre, estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), del Instituto Politécnico Nacional (IPN), en compañía de alumnos de otras universidades, realizaron la histórica “Marcha del Silencio”, en la que participó el rector Javier Barros Sierra.
El 2 de octubre del 1968, en la Plaza de las Tres Culturas, en Tlatelolco, el Batallón Olimpia fue utilizado como un grupo de choque para reprimir a los estudiantes que realizaban un mitin.
Esa tarde, los integrantes del Batallón Olimpia se infiltraron vestidos de civiles en Tlatelolco, pero se distinguieron por usar un pañuelo blanco o un guante del mismo color, indistintamente, durante el enfrentamiento. Una luz de bengala fue la señal para que iniciaran los disparos de manera indiscriminada contra la multitud, esto quedó evidenciado por los testimonios de los líderes estudiantiles y el material fotográfico que se dio a conocer años más tarde.
A 50 años de los hechos, no existe una cifra exacta de estudiantes que érdoerpn la vida, fuentes gubernamentales hablan de poco más de 20, pero otras fuentes refieren a cientos de víctimas.
Es por eso que el “2 de octubre no se olvida”, pues es un referente para la historia del país.
Con información de Noticieros Televisa
