Ciudad de México.- Tan sólo en los últimos tres años, el Senado de la República invirtió 25 millones 190 mil 699 pesos en ciberseguridad para protegerse de los ataques informáticos que recibe desde naciones como China, Rusia y Estados Unidos, a partir de que entró la política llamada “Senado digital y abierto”.
Las amenazas a plataformas e información digital del Senado se intensifican cuando se discuten leyes trascendentes como la Ley de Seguridad Interior, aprobada en diciembre pasado; sin embargo, a partir de que se adquirió un nuevo software de protección en 2015, ningún ciberataque ha tenido éxito hasta el momento.
«Diario tenemos alguna incidencia, algún intento de ataque; algunos muy intensos, otros no tanto, pero, en general, se intensifican un poco más de acuerdo a las leyes que se pudieran procesar, y son cuando son más fuertes.»
«Pero en lo general, al estar en el acceso público y en la web, es estar comprometido siempre. Entonces, simplemente es no bajar la guardia”, dijo Carlos Fabián Bragaña Méndez, director de Infraestructura Informática y de Comunicaciones del Senado, en entrevista con Excélsior.
De acuerdo a los informes sobre Contrataciones en materia de Obras Públicas, Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios Formalizados del Senado, en 2015, bajo la presidencia de la cámara alta de Miguel Barbosa, se adquirió el software que brinda el “servicio de prevención, monitoreo y detección de amenazas y fallos en la red informática y de comunicaciones en los sistemas y la información digital de la Cámara de Senadores”, con la empresa Millenium Technologies, S.A. DE C.V.
El costo por la infraestructura, instalación, configuración y puesta a punto del software, realizado del 1 de junio al 30 de septiembre 2015, se firmó bajo un contrato por adjudicación directa por un monto de 15 millones 582 mil 744 pesos, con IVA incluido.
«Lo que nosotros llamamos seguridad perimetral ya queda un poco ambiguo con las nuevas tendencias tecnológicas y ahora esa seguridad perimetral se ha hecho más amplia. Nuestra seguridad perimetral se vuelve el mundo completo, para ver qué es lo que está sucediendo afuera y saber por dóndete debes de cuidar, sobre todo con ataques importantes que llegamos a tener de China, desde Rusia, Argentina, Corea, Estados Unidos”, agregó el funcionario.
Posteriormente, en la administración del senador Pablo Escudero, se contrató con la misma empresa el licenciamiento del software, en el periodo del 5 de octubre de 2016 al 5 de octubre de 2017, por un millón 539 mil 552 pesos.
Carlos Bragaña explicó que estas inversiones permitieron al Senado tener “el brazo fuerte a la Cámara en ciberseguridad”, pero fue hasta 2017 cuando se tuvo recursos económicos para lograr robustecer el sistema, “adicionado manos y ojos para proteger los activos del Senado”; es decir, por un monto total de 8 millones 68 mil 403 pesos se contrató con Millenium Technologies a un equipo de expertos para que alerten y resuelvan las ciberamenazas del mundo contra el Senado.
“El ataque más común es el de negación de serviciospara tirar la visibilidad (en internet) que tiene la página principal del Senado”, detalló Bragaña Méndez.
Aunque dicho ataque, conocido entre los informáticos como DDoS (Ataque de denegación de servicio), es persistente, también se reciben otros como el llamado Phishing, que es el robo de información o de identidad.
«Se necesita un trabajo coordinado no solamente del equipo del Senado sino estar en comunicación con la gente de afuera, porque las tendencias tecnológicas evolucionan día con día hacen que no siempre estemos actualizados y protegidos al cien por ciento”, explicó Carlos Bragaña.
Antes del software con el que hoy opera, la protección del Senado “dependía de fases menores de protección de seguridad por temas presupuestales, principalmente”.
En 2008, medios de comunicación dieron a conocer que la página de internet de la Cámara de Senadores fue intervenida por llamados hackers, quienes bloquearon el portal de los senadores con una imagen de la Chilindrina, personaje de la serie cómica de El Chavo del Ocho, acompañado de mensajes que rechazaban “la privatización” de Pemex y otros contra el otrora presidente Felipe Calderón.
Fuente: Excélsior