MÉXICO.- Unas lindas zapatillas. Lencería de algún color en específico. Cabello peinado de alguna manera en especial o simplemente observar los pies de las personas.
Son algunos de los llamados fetiches sexuales, que a veces se materializan en objetos, en situaciones diferentes o en manías.
Conocido popularmente como fetichismo, los sexólogos han catalogado más de 130 tipos.
Por ejemplo, de acuerdo con una encuesta realizada por una marca internacional de preservativos, la mayoría de los jóvenes millennials, tanto hombres como mujeres, siente excitación o placer al ver, tocar o besar los pies.
De los encuestados, un 81.5 por ciento manifestó sentir atracción por los pies; 92% son hombres que se sienten atraídos por pies femeninos.
A la lista de los fetiches preferidos por los hombres son: voyerismo, látex, dominación y sumisión, piercings, cabello, agua.
En tanto que a las mujeres mexicanas les gustan: los hombres con traje o esmoquin, que su pareja use camiseta blanca, la barba, brazos y espalda fuertes, las motocicletas.
Y con el acceso a las redes sociales, hacer realidad alguno de los fetiches es más fácil.
Por ejemplo, en grupos de Facebook donde se venden diversos tipos de mercancías, también se pueden comprar fotografías hasta en 500 pesos donde se muestren los pies o se modele algún tipo de zapatos.
En entrevista con Paola Rojas, el sexólogo David Barrios habló sobre el fetichismo.
«Me gusta verlo como una manifestación de la diversidad sexual que consiste en la atracción erótica hacia objetos inanimados o bien prendes o bien partes específicas del cuerpo. Esto supone que ante el contacto con esos estímulos la persona fetichista experimente deseo, excitación y eventualmente orgasmos».
El experto señaló que «la adoración erótica» hacia los pies es muy frecuente.
«No podríamos considerarlo como una rareza o como un trastorno, siempre y cuando se cumpla la triple regla de oro: la persona está bien, su pareja o sus parejas lo aceptan gustosos y desde luego no se infiere daño a terceras personas (…) Me parece que ese comportamiento es ético en la medida en que no daña a nadie».
Asimismo, indicó que el fetichismo no es problema, sino los trastornos obsesivos, compulsivos.
«Hay personas que se clavan en la textura, llegan a ser obsesivos, compulsivos y dejar de disfrutar el estímulo para convertirse en algo ansioso, perturbador. Ahí estamos en presencia de algo que necesita ayuda profesional».
David Barrios agregó que todos tenemos algo de fetichistas.
«Cerca del 100% de la población tenemos uno o más fetichismos. Ahora, reconocerlo públicamente es distinto».
Con información de Noticieros Televisa