CIUDAD DE MÉXICO.- Para muchos es un número más, pero para otros el 13 representa mala suerte.
Esta superstición es muy antigua y fuertemente arraigada en países de América Latina y en España. Todos los días martes 13 se consideran de mal agüero.
Lo mismo ocurre con los viernes 13 en Francia y países anglosajones.
Las primeras referencias escritas sobre la mala fortuna relacionada con este número se originan en la mitología nórdica, en la era precristiana en una cena entre doce dioses en el Valhalla, y luego Loki, el Dios del Mal, apareció como el invitado número 13 para provocar la muerte de Balder, el Dios del Placer y la Alegría.
Y al iniciarse la era cristiana, en los países mediterráneos estaba ya bien arraigada la creencia de la mala racha del 13. Misma que se reforzó por la cena más famosa de la historia: La Última Cena. Jesús y sus apóstoles sumaban trece personas. Y menos de veinticuatro horas después Cristo era crucificado.
La Kabbalah judía señalaba también la presencia de 13 espíritus malignos.
Incluso en la astrología, en el Tarot, la muerte y la desgracia están asociadas a la carta número 13.
Así, el 13 es prácticamente borrado de varios lugares y situaciones. Por ejemplo, en Madrid no existe la línea 13 de autobús. En Francia nunca se le da a una casa este número, en su dirección. En Italia la lotería nacional lo omite.
Incluso, las líneas aéreas internacionales obvian este número en los asientos de los aviones.
En Estados Unidos, los rascacielos y departamentos dan al piso que sigue al 12 el número 14.
El Dr. Eduardo Calixto, jefe de Neurobiología del Instituto Nacional de Psiquiatría «Ramón de la Fuente», habla sobre la sugestión.
Con información de Noticieros Televisa