MUNDO.- El estado de Sao Paulo comenzó este viernes la vacunación contra el covid-19 de niños de entre 5 y 11 años, dando inicio a una campaña nacional en Brasil que provocó nuevas discordias entre el presidente Jair Bolsonaro y las autoridades sanitarias.
En un acto simbólico en el reputado Hospital de Clínicas, en el centro-oeste de la mayor metrópoli latinoamericana, un menor indígena de ocho años con deficiencia motora se tornó en el primer niño en vacunarse en Brasil en medio de un crecimiento vertiginoso de los contagios por el auge de la variante Ómicron del coronavirus.
«Estamos vacunando al primer niño», dijo durante ese acto el gobernador de Sao Paulo, Joao Doria, uno de los candidatos para las presidenciales de octubre.
La inoculación masiva comenzará la próxima semana en ciudades como Sao Paulo, Río de Janeiro y Belo Horizonte (sureste), con prioridad a menores con limitaciones de movilidad, deficiencias permanentes y grupos vulnerables, como indígenas, entre otros.
La vacunación de esa franja, estimada en 20.5 millones de personas (entre una población total de más de 210 millones de habitantes), se realizará con dosis pediátricas de Pfizer-BioNtech y debe contar con la autorización de los padres.
Con el comienzo de esta campaña, un mes después de que la autoridad sanitaria (Anvisa) aprobara esos inmunizantes, Brasil se une a una lista creciente de países que extendieron la inoculación a ese grupo etario, entre los cuales están Estados Unidos y Alemania.
El inicio de la vacunación de niños estuvo precedido de controversia por cuenta de críticas al gobierno por su supuesta demora para darle vía libre y declaraciones de Bolsonaro que lo enfrentaron de nuevo con Anvisa.
El mandatario ultraderechista, que dice no haberse vacunado y que no inmunizará a su hija Laura, de 11 años, pidió hace semanas a la agencia sanitaria publicar los nombres de los responsables de aprobar la inmunización de menores, desatando una ola de amenazas contra la entidad.
Bolsonaro, quien ha bromeado diciendo que las vacunas pueden transformar a la gente en «caimán», advierte de supuestas contraindicaciones para los menores.
Muchos especialistas consideran que la inclusión de los niños en la campaña de vacunación es clave para protegerlos y detener la pandemia, en momentos en que se esparce la variante ómicron.
Brasil, que acumula más de 620 mil muertes por coronavirus, una cifra superada solo por Estados Unidos, cuenta con un 74.1% de la población vacunada con dos dosis.
Con información de AFP