Argentina.- El argentino se abrió al futuro de Los Fabulosos Cadillacs, su nuevo disco como solista y lo especial de ser padre.
Vicentico abandonó su cuarto antes del mediodía. Camina por el césped del patio trasero de su hotel, mirando la escultura de una vaca rosada que simula pastar. Le ha llamado tanto la atención que la bovina rosada fue merecedora de una historia en Instagram.
Un café le aguardó en la mesa. Del otro lado Adrián Dargelos, de Babasónicos, platicaba con sus amigos. Una podadora se entrometió en la charla exclusiva que sostuvo con Excélsior, pero ni se inmutó.
El argentino gozó de la tranquilidad de una ciudad al filo de la paranoia por el coronavirus. “Somos afortunados de poder tocar, pero si algo sucede, debemos acatar lo que ordenen las autoridades de su país”, mencionó mientras endulzaba su café negro.
Hoy, a las 16:30 horas, subirá al escenario Telcel del Vive Latino, que se realizará en Foro Sol. Adelantó que Florían, su hijo y también parte de Los Fabulosos Cadillacs, vino para acompañarlo en un par de rolas y una junta.
¿Cuánto simboliza en tu vida ver crecer a tu hijo al interior del grupo que comenzaste hace más de tres décadas?, se le cuestionó, aprovechando que sacó al tema a su pibe, de 25 años.
“Entiendo que de afuera supone una cuestión, pero para mí siempre fue y ha sido un compañero de gira. El otro día platicábamos que el año pasado fue el primero de su vida que no vino a México.
“Cuando él estaba en la panza de Valeria, estábamos de gira acá; cuando nació, también. Todos los años se ha convertido en mi compañero ideal, él para mí, aclaro; yo para él, puede que no, porque soy su padre y lo molesto mucho como ley de vida”, acabó su idea antes de echarse a reír y contestarle un WhatsApp.
Los 55 años no los aparenta. Salió de su habitación con su playera de mangas tres cuartos, o las de beisbol dirían en la calle, sus jeans y unos tenis para correr fluorescentes.
Conserva esa vitalidad y rebeldía con la que comenzó en Los Fabulosos Cadillacs en 1984, a un año de la abolición de la dictadura militar en su país, que comenzó un auge de libertad y rebeldía juvenil que ellos, junto a Fito Páez, Soda Stereo, entre otros, abanderaron.
Con la diferencia de que ha dejado de darle duro al escabio, el equivalente de su patria al popular chupe mexicano.
“Esperemos que el futuro de la banda no esté sólo en Florían y Astor (hijo del Sr. Flavio, bajista de LFC) sino también en nosotros, porque a veces. por cómo se ve uno, creen que por nuestra mayoría de edad ya estamos más allá.
“Y hablo también por mis compañeros, ninguno siente que estemos acabados, al contrario, se nos suspendió el show en Lollapalooza Argentina (por alerta sanitaria), pero ya estamos ensayando, y seguramente haremos más discos; además, todos estamos sanos y vienen más años por delante”, aseguró.
Su regreso, tras el parón de dos años, sería en su patria en dos semanas; sin embargo, ante la falta de reposición, su regreso será en Querétaro, el próximo 30 de mayo, en el Pulso GNP.
El último álbum de Los Fabulosos Cadillacs ha sido La salvación de Solo y Juan, en 2016.
Un romántico darks
Los canales oficiales en plataformas muestran Freak como su canción más nueva, el adelanto a lo que será su próxima entrega en solitario, que él tiene pensado soltar en mayo, pero depende de la disquera.
Come ansias de que sea escuchado. Lo tiene listo y se disculpó por no traer alguna copia para poder calarlo, peor aún, no estamos en su tierra para subir a su automóvil y darnos el primer quemón.
Una especie de Carpool Vicentico. “Sólo que yo no cantaría”, puntualizó antes de caer en las carcajadas. Dijo que es su método y el tiempo en el que suele escuchar sus álbumes
“Este tema tiene un concepto más de los 50, de los 60, para montarnos en un ritmo tipo a la salsa bugalú, tiene también unas influencias de algunos salseros viejos como Alfredito Linares.
“Es totalmente bailable, con un poder orquestal único. Después el resto del disco no es tan así, tiene mucho más que ver con la letra”, mencionó.
Freak tiene un poco que ver con un complejo infantil que tuvo, se sentía diferente a los demás chicos del barrio, según detalló.
Para ser un hombre al que no le gustan las entrevistas, Gabriel Fernández Capello se soltó también a hablar de sus viscerales versos melosos, y esbozó una sonrisa por el calificativo.
Las canciones más escuchadas en las plataformas son No te apartes de mí, junto a su esposa la actriz argentina Valeria Bertuccelli; Creo que me Enamoré y Esclavo de tu amor, entre otras.
“Siempre lo fui, no lo voy a negar. Lo que pasa es que con los Cadillacs todos escribimos y las canciones van para otro lado.
“Pero el romanticismo como género antiguo, lo tomo desde la parte oscura; sí soy meloso, pero uno de naturaleza darker, hasta emo. Hay mucho de esta corriente que me identifica, lo que pasa es que me cuesta a mí verme de esa manera, porque soy así y también otras cosas”, atajó.
A raíz de esa colaboración con la madre de sus hijos, le han preguntado si volverá esa dupla íntima, pero la descartó.
“De hecho, no hay colaboradores en el nuevo disco, los hay, pero a nivel musical, con nombres no tan conocidos en la parte popular”, añadió.
La producción fue de Héctor Castillo, encargado del último material de LFC. “Si a mí se me ocurre algo difícil, él la empeora”, justificó su presencia en lugar de la de Cachorro López.
El trap es el nuevo punk
Vicentico también es hincha del futbol. Frecuenta el estadio Pedro Bidegain para ver a su querido San Lorenzo. “Sólo que ahora han parado también la Superliga”, lamentó.
Y un hombre atraído por cuanta cantidad de música se puede imaginar. Su hijo el chico, Vicente, trae la fiebre del trap, y comparte muchos gustos con su padre, quien lamenta el fallecimiento del rapero estadunidense XXXTentacion, por ser el abanderado de la rebeldía y transgresión de este siglo.
El año pasado Duki, que también estará en el Vive Latino, levantó el teléfono para invitar a Vicentico a colaborar en Entre cuatro paredes, tema para la serie carcelaria El marginal, y se llevó un “sí” inmediato.
“Es un género que cuadra con esta era, se popularizó y levantó en el contexto perfecto. Ese gusto lo comparto con mi hijo de raíz, porque siempre me gustó el hip hop desde los 80.
Así como el punk fue evolucionando, esto es lo mismo: arrancó como una cosa (en el Bronx) y ahora hay que ver cuál de estos artistas nos lleva nuevos caminos, a nuevos beats que no tomen de videos de YouTube y los haga sonar igual”, concluyó Vicentico y abandonó su café para retirarse.
Con información de Excélsior.