MUNDO.- Dámaso López Núñez, antiguo brazo derecho, guardaespaldas y compadre de Joaquín «El Chapo» Guzmán, volverá a las cortes este viernes, tras jugar un papel clave hace un año en el juicio contra el líder del cártel de Sinaloa y colaborar con las autoridades estadounidenses para asegurarle una sentencia a cadena perpetua gracias a su testimonio, cargado de revelaciones.
Pero a diferencia de 2019, «El Licenciado» no tomará el estrado para atestiguar esta vez. Por el contrario, escuchará lo que pocas veces toca a un líder mexicano del narcotráfico: que el gobierno estadounidense hable bien de él.
De forma poco habitual, el Departamento de Justicia recomendará al juez Thomas Selby III, de la Corte del Distrito Este de Virginia, la reducción de su condena vitalicia por los servicios prestados a la justicia estadounidense en el juicio de hace un año.
Los detalles de la petición de reclasificación de condena permanecen sellados y serán dados a conocer en las primeras horas de este viernes.
Lo que sí se sabe es que esta audiencia representa la culminación de un acuerdo negociado por López Núñez y la fiscalía meses atrás, cuando accedió a rendir testimonio en la corte de Brooklyn a cambio de un eventual reducción de sentencia.
Dámaso cumplió con su parte: en enero de 2019, a lo largo de varios días, dio detalles de los entresijos del funcionamiento del cártel de Sinaloa y el rol central de Guzmán en el ascenso y consolidación del imperio criminal.
Entre otras revelaciones, López Núñez dio a conocer la forma en la que Emma Coronel participó en la planeación del escape de El Chapo de la prisión de máxima seguridad del Altiplano en 2015, así como una serie de asesinatos ordenados por el líder del cártel contra integrantes de los Beltrán Leyva.
Junto con otros, ese testimonio fue central en la decisión del juez Brian Cogan de sentenciar con el máximo posible a Guzmán Loera y le valió puntos a El Licenciado en Washington.
Recluido actualmente en una prisión estatal de Virginia, Dámaso —sentenciado en septiembre de 2018 a cadena perpetua por tráfico de estupefacientes— tiene ahora frente a sí la posibilidad real de eludir el mismo destino de prisión vitalicia que cayó sobre su compadre, quien purga su sentencia en la prisión de súper máxima seguridad de Florence, Colorado.
Y a diferencia de Guzmán Loera, López Núñez tiene elementos que pueden jugar a su favor en la decisión final del juez Selby. Buena conducta, haberse declarado culpable en su propio juicio, cooperación y entrega de información. Pero en particular, el hecho de que serán dos fiscalías, la de Nueva York y Virginia, las que presentarán de manera conjunta la solicitud de revisión de sentencia.
Fuentes en el equipo de defensa de López Núñez confirmaron que se espera que las fiscalías pidan una reducción sustancial. La audiencia está prevista para las 11: 00 horas tiempo del este de Estados Unidos, 10:00 horas tiempo del Centro de México.
Con información de Milenio / Foto: Carlos Jasso / Reuters