Ciudad de México. – La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) determinó que no existen indicios de la presencia de un felino en el Desierto de los Leones, tras recorrer la zona donde supuestamente se registró el ataque de un tigre contra un perro, en la alcaldía Álvaro Obregón de la Ciudad de México.
Ello, luego de una denuncia realizada en redes sociales sobre la presencia de un animal captado con una cámara nocturna y que corresponde a un felino detectado en la reserva de investigación UWICE en el país de Bután, en el sur de Asia, en el año 2017 y no se trata de la presencia de un ejemplar de esa especie en las inmediaciones de la zona denunciada.
En un comunicado, la dependencia estableció que en el sitio del supuesto ataque, los inspectores de la Profepa ingresaron al inmueble, con el permiso del dueño, para realizar un recorrido dentro y alrededor del mismo.
Durante la visita, se constató que no existe la posibilidad de que algún felino grande ingresara al mismo, ya que se encuentra delimitado con malla ciclónica y alambre de púas, así como muros elevados de concreto y piedra volcánica.
De igual manera, ya no se encontraba el cadáver del perro atacado, el cual fue enterrado con cal en un terreno baldío circundante al domicilio. Además, se verificaron los vestigios de la supuesta agresión al canino y las huellas o rastros no corresponden a un felino.
También, el personal de la dependencia realizó un recorrido por el Parque Nacional Desierto de los Leones junto con elementos del grupo de guardabosques de dicha zona y no presenciaron rastros o huellas que pudieran corresponder a un felino de vida silvestre.
Al momento no existe algún reporte oficial de avistamiento directo de dicho ejemplar.
Con información de Excélsior