México. – El fin de semana pasado Andrés Manuel López Obrador confirmó las grandes obras que tiene para la región, además de añadir otra.
El Ejecutivo federal ratificó su promesa de instalar la zona libre en Chetumal, como se hizo al inicio de año en la frontera norte, e informó sobre los recursos federales que se inyectarán para el Tren Maya, en las entidades de Yucatán y Quintana Roo, que representan 43.3% del costo total de la vía férrea (alrededor de 150,000 millones de pesos).
Asimismo, el mandatario comunicó que ya ordenó a la CFE adquirir una planta de generación eléctrica para la península de Yucatán, con la finalidad de dar solución a los apagones que se han registrado. En otros temas, también se manifestó el apoyo del gobierno federal en la recuperación de playas y en el combate contra el sargazo.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció que el gobierno federal invertirá 40,000 millones de pesos en Quintana Roo y 25,000 millones en Yucatán para la construcción del Tren Maya, obra que —dijo— beneficiará además con empleos en la región. La suma de estos montos representaría 43.3% del costo total del proyecto regional más importante de la actual administración federal, que asciende a alrededor de 150,000 millones de pesos.
El Tren Maya prevé un recorrido de 1,460 kilómetros, tras la modificación del trazo, en tramos de selva, caribe y golfo en los estados de Quintana Roo, Campeche, Yucatán, Chiapas y Tabasco. Correrá a 160 kilómetros por hora y será destinado para transporte de pasajeros, turístico y de carga de mercancías.
“Vamos a apoyar también con la construcción del Tren Maya. Nada más esa inversión federal para Quintana Roo es del orden de 40,000 millones de pesos. ¿Y qué va a significar mientras se está construyendo? Muchos empleos, mucho trabajo en beneficio de la gente de Quintana Roo y de los que puedan venir a buscarse la vida”, comentó López Obrador.
Cabe recordar que el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) modificó el trazo del Tren Maya, y de Valladolid se desviará a Tulum (con una estación cercana a la zona arqueológica de Cobá) en lugar de llegar directamente a Cancún, como planteaba originalmente la dependencia, lo que implica una reducción de 65 kilómetros en su longitud y un ahorro cercano a 7,500 millones de pesos.
El director jurídico del Fonatur, Alejandro Varela, argumentó recientemente que la decisión se tomó por cuestiones de economía en el proyecto y para continuar con el objetivo de detonar el desarrollo social en la zona. Además, se evitará que el proyecto pase por la autopista Mérida-Cancún, con quien ya se negociaba algún acuerdo.
El ramal que irá de Tulum a Cancún está considerado que sea de doble vía para movilizar pasajeros y carga, toda vez que es la región con mayor actividad al estar ubicada en la principal parte turística del Caribe mexicano. A diferencia de otros tramos del trayecto, en la zona mencionada se tendrá que construir una línea férrea en los derechos de vía que están en poder del gobierno federal, por medio de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Con información de El Economista.