MÉXICO.- En unos instantes, la vida nos puede cambiar por completo. Zaira Aránzazu Montalvo lo sabe bien; a los 36 años sufrió un infarto cerebral.
«Ahí le dicen a mi familia que ya no hay nada que hacer, que es cuestión de horas para que yo falleciera».
Estuvo más de 30 días en terapia intensiva, tiempo en el que además una bacteria atacó su intestino grueso por lo que su vida volvió a estar en peligro.
A pesar de los peores pronósticos, Aránzazu logró recuperarse aunque ahora vive con dos discapacidades: perdió la vista periférica y tiene cuadriparesia.
«Yo tengo que concentrarme mucho para poder brasear, para darle la instrucción a mi cerebro que llegue la señal para poder reaccionar, de hecho cuando yo comienzo a entrenar para correr mi primer maratón yo arrastraba totalmente el cuerpo».
Una condición que, sin embargo, no la ha vencido. Todo lo contrario, ahora es una gran maratonista.
Lleva cinco maratones. Corre en la categoría de débiles visuales junto con su compañero guía.
En el 2019 logró subirse por primera vez al podio en el medio maratón de la Ciudad de México y desde entonces siempre ha estado en los primeros lugares.
«Creo que la mentalidad influye mucho, el deseo de hacer las cosas que es lo que a mí me ha ayudado a seguir, a ir contra todo diagnóstico que me decían que no podía correr, que no podía hacer muchas cosas, lo he hecho, me he atrevido a hacer las cosas».
Aránzazu es una soñadora incanzable. Su mayor anhelo ahora es participar en un maratón internacional y seguir siendo un ejemplo de vida para muchos.
«Cuando mente y corazón se unen todo es posible y esa ha sido mi intención, crear conciencia y empatía hacia las personas con discapacidad, ya que algunas veces se nos cierran las puertas», dijo la joven en entrevista con Paola Rojas.
Hoy, Aránzazu se dedica a llevar su mensaje a través de conferencias y coaching.
«Yo tenía la esperanza de recuperar la vista en mi primer maratón, pero no la recuperé, pero recuperé las ganas de seguir corriendo y corriendo (…) el tocar un fondo de dolor y resurgir así como el ave fénix te motiva y te lleva y te das cuenta que dentro de tus miedos existe alguien fuerte», agregó.
Con información de N+ / «Al aire con Paola» / Karina Cuevas