MÉXICO.- Entre mil 500 a mil 600 litros de agua por segundo son saneados en las plantas de tratamiento instaladas a lo largo de la cuenca de los ríos Amecameca y De la Compañía, así lo detalló el doctor Oscar Monrroy, presidente de la Comisión de la Cuenca.
Sin embargo, casi más de la mitad de las 40 estaciones de potabilización tienen fallas y no permiten otorgar a la población un abastecimiento adecuado del líquido, detalló Monroy en entrevista para la agencia Notimex.
Por otra parte, en conferencia de prensa, ejidatarios de San Mateo Huitzilzingo, informaron sobre la denuncia que presentaron ante la Auditoría Superior de la Federación por regularidades en la construcción de la planta de agua que sería colocada en un terreno comunitario de ese poblado y finalmente se asignó a un área privada.
La planta beneficiaría a más de 200 habitantes del ejido ubicado en el municipio de Chalco, Estado de México, en colindancia con el sur oriente de la capital, donde la contaminación en el río de Amecameca impide a los ejidatarios contar con agua limpia para sus actividades diarias y el riego de sus sembradíos.
Sarahí Salvatierra, investigadora de Fundar, Centro de Análisis e Investigación, comentó durante la conferencia de prensa que entre las irregularidades detectadas está la falta de estudios de mecánica de suelo e impacto ambiental, la representación de un riesgo para el acuífero por la construcción sobre el un manto freático.
También, se detectaron sobrecostos por mala planeación de obra, uso irregular del “Fideicomiso 11928 del cual en un principio se destinaron 87 millones de pesos y luego aumentó a 109, además de que se estableció un periodo de construcción de 200 días, pero han pasado tres años y no se ha terminado.
El estudio realizado por más de tres años demostró que se desvió poco más del 26 por ciento del presupuesto original por uso inadecuado de los recursos y los cambios en el proyecto.
Cabe destacar que integrantes de Fundar catalogaron esta acumulación de irregularidades en San Mateo Huitzilzingo como una señal de corrupción silenciosa y sistémica que impide la garantía de los derechos de los habitantes de las comunidades a contar con saneamiento.
Con información de Notimex
