MÉXICO.- En México habitan más de 36 millones de jóvenes y adolescentes que, de acuerdo con cifras del Instituto Mexicano de la Juventud, la mayoría ha tenido su primer noviazgo entre los 14 y 15 años de edad.
«Sí sí he tenido novio… (…) dos», dijo Yareli Contreras.
Y es que casi todos hemos tenido algún novio o novia en la primaria. Aquel noviazgo que a veces comenzaba con un papelito escrito para decir «me gustas».
«(Quería tener novio) Pues no tenía experiencia, pero nada más me preguntaron y yo dije que sí», afirmó Yareli.
María José tiene 15 años y desde hace un año cinco meses tiene novio.
«Él y yo éramos mejores amigos y pues se dio que teníamos cosas en común. (Siento) alegría por verlo».
Y es que para algunas jovencitas como Ximena de la Rosa , enamorarse o tener novio es de lo más divertido.
«Es divertido, es como una amiga también, nos divertimos, nos la pasamos bien».
Pero otros, aún no corren con la misma suerte de tener algún noviazgo en la primaria o secundaria, como Emiliano Contreras.
«Por el momento no me interesa y pues no me ha dado como la suerte que yo necesito».
O quizá el amor para ellos es diferente o tienen otro tipo de prioridades.
«Es un sentimiento que se le da a una persona o a un hobbie, por ejemplo yo tengo un amor hacia un hobbie que es ahorita el futbol americano, es algo a lo que yo me estoy dedicando mucho».
«Siento que es como una distracción en el momento que estás estudiando y siento que te quitan el tiempo para muchas cosas», afirmó Mariel Campos.
En entrevista con Paola Rojas, el sexólogo David Barrios habló sobre el enamoramiento en esta etapa.
«Son bastante comunes. En la población prepuber y puber, los chavitos, las chavitas, no solo de secundaria sino antes, de hecho es un fenómeno que ha ocurrido desde siempre nada más que antes se soslayaba o era como a escondidas».
Dijo que los papás y maestros se preocupan mucho por los enamoramientos de niños y niñas.
«Primero hay que decir que quien se enamora, para quien se enamora es inevitable ese proceso, es decir, suele suceder, a veces se consolidad en un noviazgo a veces no. Para tranquilidad de la gente debo decir que la mayor parte de los enamoramientos infantiles son ‘de manita sudada’, de cartita y en general es algo que, es importante señalarlo, nos obliga a tomar medidas, pero no deben ser ni represivas ni prohibitivas».
Agregó que los papás no deben avergonzar a los adolescentes con su noviazgo, porque esto genera problemas a la larga en autoestima y desempeño social de los chicos.
«Debemos empatizar con ellas y ellos, porque se nos olvida que nosotros tuvimos esos procesos también. (…) Lo que es importante es la hipersexualización, sobre todo de las niñas, porque en nuestra sociedad es de consumo y se presenta la imagen de las chicas de maquilladas, ‘sexy’, siendo muy chiquitas, de una manera absurda y fuera de lugar con los códigos que los niños y las niñas tienen. Eso sí debe ser ampliamente criticado con argumentos y bases».
Con información de Noticieros Televisa