MÉXICO.- Investigadores prueban que la música beneficia al cerebro humano, entre otras cosas, genera dopamina y mejora la sanación.
De acuerdo a varios estudios científicos, la música tiene varios beneficios para el cerebro del ser humano.
Investigadores de la Universidad de McGill en Montreal, Canadá, comprobaron que la dopamina está vinculada a la música.
En dicho estudio, se encontró que los niveles de dopamina aumentaban hasta nueve por ciento cuando los voluntarios estaban escuchando música que les agradaba.
En Finlandia, científicos descubrieron que la musicoterapia ayuda en el tratamiento de la depresión; de acuerdo con esta investigación realizada a 79 personas, los pacientes que usaron música mostraron una mayor mejoría que aquellos que recibieron una terapia estándar.
Detallaron que la música puede involucrar a la gente de manera que las palabras no lo hacen.
Pero la música debería estar presente desde edades tempranas. De acuerdo con un artículo publicado en la revista Nature Neuroscience, los padres que llevan a sus hijos a conciertos y espectáculos musicales infantiles o les enseñan a tocar algún instrumento tienen cerebros más fuertes e inteligentes al aumentar la materia gris especialmente en las zonas motoras, auditivas o visuales.
Neurólogos de Canadá y Estados Unidos lo demostraron al comparar a dos grupos de niños entre cinco y siete años. Cada uno de los niños del primer grupo recibió media hora semanal de clase de piano, al contrario que los infantes del segundo grupo. Bastó poco más de un año para que los cambios en la estructura cerebral de los niños del primer grupo se notaran.
La buena noticia es que los beneficios de la música se extienden a niños y adultos.
En entrevista con Paola Rojas, el jefe de Neurobiología del Instituto Nacional de Psiquiatría, Eduardo Calixto, habló sobre los beneficios de la música.
«Podemos incrementar memoria, aprendizaje, atención, proceso cognitivos cuando uno pensaría ¿la música? Y uno siempre se queda pensando ‘debe ser música de cierto tipo o de algunas características’. No. Es la música que le gusta a uno».
Indicó que los ‘beats’ rápidos incrementan la frecuencia cardiaca.
«Desde que el cerebro puede escuchar, que es en el séptimo mes de vida intrauterina, desde ahí empieza a detectar cambios en la activación, cambios neuroquímicos que eso genera en términos generales, en 4 a 10 minutos, un proceso de mayor conectividad neuronal que nunca vamos a perder y en consecuencia tenemos plasticidad positiva escuchando música, pero también hay plasticidad negativa. Hay música que de plano dices ‘no puedo con esto'».
Afirmó que cuando se escucha música que resulta estridente, el resultado es negativo.
«Te puede cambiar desde el estado de ánimo hasta condiciones de aversión y de un reforzamiento negativo (…) es cuestión nada más de escucharlo, puedo pasar una mala tarde, una mala comida o condicionamientos de ‘no puedo más con esta condición'».
El experto señaló que la música está involucrada en toda la conducta humana y está muy relacionada con el cerebro.
«Hacer música es construir felicidad, cambiar estados de ánimo, poner más atención e incluso hacer que este proceso se vaya integrando de manera distinta que al grado de que tengamos que decir, ‘si no pongo música no soy yo’, o cambia mi actividad laboral o cambia el transitar por una calle».
El neurocientífico también se refirió a lo comprobado en 1999 sobre el «Efecto Mozart».
«Específicamente la ‘Sonata para dos pianos K-448’ quien la escucha, independiente de donde estemos… le pusieron la ‘Sonata que sedujo a las neurociencias’, inmediatamente incrementas procesos cognitivos, memoria, aprendizaje, tranquilidad, se duerme mejor, se come mejor, se identifica mejor una situación problemática. De todas las 52 piezas que se estudiaron esta (…) tiene un efecto tan hermoso de sincronía de actividad neuronal que te tranquiliza y disfrutas mucho el día. O sea, que independientemente si es en la mañana o en la noche o en la tarde esto cambia totalmente tu repercusión de cómo escuchas música», concluyó.
Con información de Noticieros Televisa