MÉXICO.- Plumas en el sombrero, abanicos, paraguas de olanes, trajes de seda, zapatillas de raso y boca carmesí. Así siempre, Esperanza Iris. Así la Reina de la Opereta.
María de los Ángeles Estrella del Carmen Bonfil y Ferrer nació el 30 de marzo de 1884 en Villahermosa, Tabasco.
A los nueve años debutó en la Compañía Infantil de Austri y Palacios, en la obra «Las Compras del Carreón», en la que actúo y cantó durante cinco años.
Destacada por su increíble voz, su capacidad histriónica y su independencia, eligió llamarse Esperanza Iris, y en 1896 probó suerte como actriz de opereta en el Teatro Abreu.
Tras cultivar la zarzuela, se dedicó a la opereta, género en el que alcanzó sus mayores éxitos en México, La Habana y Madrid.
Entre sus interpretaciones destacaron: La viuda alegre, El conde de Luxemburgo y La princesa del dólar. Actuó también en el cine mexicano durante los años treinta.
El atentado que la llevó del éxito al olvido
En 1918 se convirtió en la primera mujer en abrir su propio teatro en México, pero la decisión que tomó en 1938 la llevaría al declive: casarse con Paco Sierra, cantante de ópera 20 años menor que ella.
En 1952, en México, se registró uno de los primeros atentados en aviones comerciales. El 24 de septiembre de ese año, una bomba explotó en el aire en un vuelo de la entonces aerolínea Mexicana, que se dirigía a Oaxaca.
Francisco Sierra y su socio, Emilio Arellano, fueron los culpables de este acto con el propósito de cobrar varias pólizas de seguros, sin embargo, nadie murió en el atentado y tanto Sierra como Arellano fueron encarcelados.
Con ello la caída de Esperanza Iris, quien siempre creyó en la inocencia de su esposo y lo defendía en cada acto público que podía.
Poco a poco, de ser la Reina de la Opereta y una de las mexicanas más ovacionadas comenzó a entrar en el olvido del público.
En entrevista con Paola Rojas, Silvia Cherem habló sobre los motivos que la llevaron a escribir el libro «Esperanza Iris, traición a cielo abierto».
«Estaba en Galápagos, en un viaje familiar, y la hija de uno de los pasajeros de ese avión me contó que a la familia le encantaba venir a México, pero quedó tan mal herido el padre que nunca más volvieron».
Dijo que la revelación la llevó a la hemeroteca, a los archivos personales de Esperanza Iris y hasta el testimonio que escribió una estadounidense que también iba en el avión. Con esa información escribió su libro.
«Imagínate una mujer que en 1918 logra totalmente, con el trabajo de su trabajo, juntar centavo a centavo para construir su propio teatro, el Teatro Esperanza Iris, el teatro hoy de la Ciudad».
Dijo que su esposo quiso abusar de la fama de ella y convertirse en un barítono.
Agregó que el domingo 7 de octubre presentará su libro en el Gran Hotel de la Ciudad de México.
«Es uno de los sucesos más olvidados para nuestra generación, pero uno de los más determinantes en la historia de México».
Con información de Noticieros Televisa / Foto: Twitter/@SilviaCherem