Ciudad de México.- Después de navegar mil 576 kilómetros, 112 horas y cinco días, el Buque Escuela Velero Cuauhtémoc arribó a la Habana, Cuba, donde recibió el fuego olímpico en conmemoración de los 50 años de los Juegos Olímpicos celebrados en México, y este mismo día zarpó con rumbo al Puerto de Veracruz.
Al arribo al puerto de La Habana, elementos de la tripulación cantaron los himnos del Buque Escuela Velero “Cuauhtémoc” y de los Cadetes de la Naval, asimismo al Buque insignia le realizaron una Ceremonia de bienvenida, más tarde, ya en puerto los cadetes de la Heroica Escuela Naval montaron una Guardia de honor en el Monumento a José Martí y en el Museo de la Revolución se llevó a cabo el encendido y entrega del fuego, además de un recorrido con el pebetero olímpico por las calles principales de la capital cubana.
Citado recorrido finalizó en la escala del Buque donde autoridades, locales, navales y militares, así como del Comité Olímpico de México y Cuba entregaron el fuego olímpico en una lámpara de seguridad al Capitán de Navío Rafael Antonio Lagunes Arteaga, comandante del Buque Escuela Velero Cuauhtémoc.
Posteriormente, se efectuó el zarpe del Embajador y Caballero de los Mares donde los capitanes, oficiales, clases y marinería, realizaron la maniobra correspondiente y subieron por alto, al toque del pito marinero de hombres al pie de la jarcia, con el fin de realizar los honores al puerto visitado.
Es importante mencionar que a bordo del Buque Escuela Velero Cuauhtémoc se encuentra la lámpara de seguridad y el pebetero olímpico, los cuales serán trasladados vía marítima de Cuba hasta el Puerto de Veracruz.
Para la Secretaría de Marina-Armada de México trasladar el fuego olímpico como hace 50 años es revivir cuando México presentó al mundo la original modalidad de transportar el fuego olímpico, un recorrido que trazó el Buque Cañonero ARM Durango, que actualmente se encuentra dado de baja por sus años de servicio en la Armada de México; en ese año el buque transportó el fuego olímpico de México, el cual fue encendido en Grecia, y siguió simbólicamente la ruta marina de Cristóbal Colón del puerto de Palos a San Salvador, en su trayecto a Veracruz.
Es importante mencionar que para rememorar el recorrido de la antorcha olímpica con alegría y emoción, el próximo 14 de septiembre del actual, el buque Cuauhtémoc parará máquinas y enfilará su proa por la bocana del Puerto de Veracruz, para el descenso y traslado en mar abierto del fuego olímpico hacia el puerto, lo anterior a través de un grupo de nadadores que desarrollarán un recorrido de relevos hasta el malecón; lugar donde se entregará la antorcha a un corredor que inicia la marcha al primer pebetero ubicado en el Faro Venustiano Carranza del Puerto de Veracruz.
Con información de Excélsior
