Ciudad de México.- Desorganización en las regiones, alta burocracia en la Secretaría de Educación (SEG), duplicidad de funciones y profesores que desempeñan labores ajenas a la plaza que poseen son algunas de las problemáticas que enfrenta Guerrero en este sector.
También arrastra deficiencias administrativas para la plena aplicación de la reforma educativa, además de que la Secretaría de Educación Pública (SEP) no contempla una estrategia inmediata para el reordenamiento en la entidad, a diferencia de lo ocurrido en Oaxaca y los proyectos para Michoacán y Chiapas.
La SEP y el titular de la dependencia estatal, José Luis González de la Vega, defienden que su intervención ha sido de forma paulatina desde hace, al menos, cuatro años, y aseguran que la poca presencia de la disidencia magisterial ha ayudado en los procesos de mejora.
Aunque es una entidad que presume mayor operación en el tema educativo frente a la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (Ceteg), por ejemplo en los avances en la aplicación de la evaluación docente, permanecen los rezagos.
González de la Vega admitió que aún existe duplicidad de funciones y profesores que desempeñan labores ajenas a su plaza; tan solo en la Secretaría de Educación estatal laboran alrededor de 4 mil 254 empleados en oficinas centrales y en las ocho delegaciones educativas.
Indicó que la secretaría cruza plantillas de personal mediante un sistema que concentra la información estatal, federal y particular, así como la de las Unidades Administrativas locales, con un universo de 10 mil 851 centros de trabajo.
“Sin duda tenemos mucha gente que cobra indebidamente, pero sí puedo asegurar que el cruce de nómina y la verificación de las plantillas de personal nos va a permitir poner orden y evitar losaviadores”, expresó.
El funcionario que ocupa por un segundo periodo la titularidad de la secretaría, la primera fue durante el mandato del ex gobernador perredista Zeferino Torreblanca, de 2005 a 2011, presumió que ha aplicado estrategias como el sistema de cambios y permutas, que permite el registro de solicitudes para cambios de adscripción, así como módulos de validación de documentación. “Esto es para retirarle el control a la Ceteg de estas plazas y su mal uso”, sostuvo.
Actualmente, la Secretaría de Educación estatal cuenta con 198 plazas de mandos medios o personal de confianza, con un costo de alrededor de 76 millones de pesos, y solo busca reducir 10 por ciento para llegar a 178, que representará un gasto de 67 millones de pesos.
“Cuando llegamos había nombramientos de jefatura de departamento, directores y hasta directores de programas que estaban en manos de la disidencia, como son mandos de confianza; les pedimos la renuncia, algunos nos demandaron, pero ya están dados de baja. Hemos ido quitando el control que los demás gobiernos le habían entregado”, afirmó.
Al respecto, Martín Radilla, secretario de organización 6 de la sección 14 del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE), destacó un crecimiento desproporcionado de la burocracia:
“La Secretaría de Educación tiene una burocracia muy alta, son ocho regiones más la propia secretaría, estaríamos hablando de entre 8 y 12 mil trabajadores que están incrustados en la dependencia, que son maestros que están haciendo funciones administrativas.
“Dentro de ese organigrama hay trabajadores que son de preescolar, de primaria, y que por problemas diversos llegaban a las subcoordinaciones regionales. Toda esta burocracia creció de manera desproporcionada”, sostuvo.
Guerrero también cuenta con casi 7 mil 900 plazas que no están reconocidas en el Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa y Gasto Operativo (FONE) y, de acuerdo con la Secretaría de Educación, fueron entregadas a discreción por los anteriores gobiernos, antes de que entrara en vigor la reforma.
Estas plazas, que deberán ser sometidas a los controles de evaluación que establece la Ley General del Servicio Profesional Docente, le cuestan al gobierno estatal alrededor de mil 100 millones de pesos al año.
Otro de los objetivos que busca la dependencia estatal es la eliminación de “estructuras espejo”. En Guerrero existen ocho regiones educativas: Acapulco-Coyuca, Centro, Costa Chica, Costa Grande, Montaña Alta, Montaña Baja, Norte y Tierra Caliente. La secretaría analiza dejar siete y convertir la Montaña en una sola.
El secretario de Educación consideró que en Guerrero, “a diferencia de los otros tres estados, la titularidad le pertenece al SNTE, no a la coordinadora… lo que nos ha ayudado mucho a aplicar todos los programas que vienen de la Federación”.
Sin embargo, para Fernando Ruiz, investigador de Mexicanos Primero, el problema de la educación en Guerrero no es responsabilidad exclusiva de la Ceteg, pues apenas reportan alrededor de 5 mil integrantes frente a los poco más de 68 mil maestros que hay en el estado.
Consideró que la sección 14 ha colonizado a la secretaría, pues existe presencia de ex dirigentes magisteriales en cargos de la dependencia; por ejemplo, el subsecretario de Educación Básica, Emiliano Díaz Román, que fue secretario general de la sección 14 en la administración estatal pasada.
Fuente: Milenio