MÉXICO.- Todo comenzó en junio de 2018. Un video grabado por Esperanza Nava se hizo viral en redes sociales.
Se observa a un hombre, al que se identificó en ese entonces en la red como Lord Golpeador, cómo la amenaza una y otra vez.
Como una forma de protegerla, Esperanza decidió grabar el momento en el que su vecino estaba agrediendo a una mujer en los pasillos del edificio donde ambos vivían.
La reacción del hombre fue en extremo violenta.
A partir de ese instante, Esperanza decidió documentar en varias grabaciones las constantes agresiones del vecino en su contra.
Un año después, en mayo del 2019, y después de varios incidentes, Esperanza fue golpeada por el hombre, mientras ella esperaba a que llegara el apoyo policiaco que solicitó después de que la persiguiera y le gritara en varias ocasiones que la odiaba.
En una larga historia contada en Twitter, la chica aseguró que la patrulla nunca llegó, pero sí el hombre quien la golpeó, acompañado de otras personas.
Esperanza lo denunció por lesiones y él por daño moral.
Ella fue declarada inocente, pero el agresor permanecía libre, a pesar de que incluso ya había sido denunciado antes por cinco personas más.
Esperanza no se dio por vencida. A pesar de las amenazas, ella siguió con la demanda hasta sus últimas consecuencias.
Después de un largo proceso de más de tres años, ganó el juicio en contra de su agresor.
Arturo Said Bernal, conocido en redes sociales como Lord Golpeador, fue sentenciado a siete meses y 15 días de prisión, por las amenazas relacionadas con violencia de género cometidas contra su vecina. Sin embargo, debido a que la condena es menor a tres años puede seguir libre a cambio de trabajo comunitario.
Afortunadamente, el juez dictaminó que no deberá acercarse a Esperanza nunca más, ir a firmar cada cierto tiempo y tomar terapia.
En entrevista con Paola Rojas, Esperanza dijo que fue un proceso muy difícil.
«No quedaba de otra, tenía que denunciarlo, tenía que seguir el proceso y afortunadamente ya tenemos una sentencia que lo condena».
Esperanza señaló que hubo una primera denuncia contra su agresor. Detalló que fue por amenazas.
«Esa continúa completamente perdida. No sé qué pasó. Cuatro años de esa y a raíz de eso al año me golpea y me amenaza de nuevo. Ya eran amenazas incluso de muerte. Entonces fue que ahí se siguió otro proceso y fue por el que ya fue sentenciado por un juez. No creí que llegaríamos a ese punto, pero me da mucha alegría porque eso significa que hay un poquito de esperanza para otras mujeres que sufren de violencia».
Agregó que denunció el caso y decidió darle seguimiento por ella y otras mujeres. Dijo que de no haberlo hecho, hubiera sido parte de la impunidad.
«Cuando denuncié yo no sabía que iba a pasar años en audiencias, que me iban a revictimizar, hubo un momento en la audiencia en el que el juez se reía con mi agresor (…) yo creí que tal vez haciéndolo del conocimiento de la gente podemos lograr un cambio y podemos empoderar a otras mujeres que sufren de violencia a hacer lo mismo. La sentencia condenatoria significa que el día que este tipo agreda a alguien más ya va a tener antecedentes y eso para mí es quedar con la conciencia tranquila».
Con información de Noticieros Televisa / «Al aire con Paola» / Karina Cuevas