MÉXICO.- Durante la primera quincena de abril, el precio de los antojitos mexicanos como los tacos y las tortas tuvieron un incremento de 11.75 por ciento, el más alto para el mismo periodo en 23 años, pues en el 2000 se ubicó en 15.02 por ciento, esto de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Esto se debió al aumento de los costos de los granos, a raíz de la invasión rusa en Ucrania; por lo que en este contexto, la tortilla tuvo un alza de 12.78 por ciento, mientras que la harina de trigo repuntó 24.61 por ciento.
Los comerciantes de este tipo de alimentos confirman que han tenido que aumentar los precios de sus productos entre uno y cinco pesos.
“El impuesto de las tortillas está muy elevado y pues ahora si nos está afectando en las taquerías, tuve que aumentar los precios, no mucho porque la situación está dura” comentó Raúl González, un vendedor de tacos sobre avenida Balderas, en la colonia Centro, en la alcaldía de Cuauhtémoc.
Mientras que Guillermina Hernández, quien trabaja en un local de tacos en la esquina de la calle Victoria, coincidió que “tuvieron que aumentar dos pesos por taco. Aunque luego los clientes reclaman que por qué subieron y pues obviamente pues si es lo que les decimos, la tortilla, los limones, todo ha subido, si no lo subieran obviamente tampoco nosotros subiríamos los tacos”.
Otros comerciantes refieren que el incremento que hacen a sus alimentos no corresponde con la ganancia que deberían tener, pues buscan minimizar el impacto para sus clientes para que sigan teniendo ventas. “Ya tenemos precios establecidos, nos lo podemos estar subiendo cada rato porque hay mucha competencia. Y luego los clientes se van. Ya no se gana como antes, por más que uno le jale, a uno ya no alcanza lo que le pagan y así andamos todos a la carrera” explicó Enrique Castañeda, quien tiene un puesto de tacos, quesadillas y gorditas frente a la estación del Metro Juárez.
El aumento de los insumos sumado al incremento de las rentas hace que los comerciantes vivan prácticamente al día.
Por su parte, los clientes han optado por buscar opciones más económicas para comer o de plano piden menos productos.
“Antes comía en unos tacos que estaban en 22 y hoy están a 27, aumentó 5 pesos. Yo le busco a dónde comer más barato, ya no acudo a los mismos lugares de antes porque el precio se fue para arriba” argumentó el señor Ángel Gamiño.
Con información de Milenio