MUNDO.- El Ejército de Israel ha asegurado este jueves haber matado a 60 supuestos miembros del partido-milicia chií Hezbolá en bombardeos ejecutados durante las últimas horas contra el sur de Líbano, incluido uno contra la sede de la Alcaldía de Bint Yabal, en el marco de la invasión desatada durante la madrugada del martes tras cerca de dos semanas de campaña intensificada de ataques contra el país.
«Alrededor de 60 terroristas han muerto y 200 objetivos han sido atacados, incluida la Alcaldía de Bint Yabal, que servía como refugio para Hezbolá», ha dicho en un comunicado en el que ha detallado que alrededor de 15 presuntos integrantes del grupo han muerto en este ataque.
Asimismo, ha reseñado que entre los objetivos atacados figuran también «edificios militares», «almacenes de armas», «puestos de observación» e «infraestructuras militares», al tiempo que ha apuntado que también han muerto «terroristas que lanzaron misiles» contra territorio israelí.
Por otra parte, ha confirmado el derribo de un dron lanzado desde Líbano frente a las costas de Nahariya, mientras que un segundo aparato no tripulado ha impactado «en un espacio abierto». Además, ha recalcado que también han sido lanzados 25 proyectiles contra Israel, si bien ha incidido en que «no hay víctimas» por estos ataques.
Además, el portavoz en árabe del Ejército israelí, Avichai Adrai, ha acusado a Hezbolá de «intentar usar el cruce fronterizo civil de Masnaa, en la frontera entre Siria y Líbano, para la transferencia de medios de combate a territorio libanés».
«Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) instan al Estado de Líbano a realizar inspecciones estrictas de los camiones que pasan por cruces civiles y a devolver camiones y vehículos que contengan armas a Siria», ha señalado a través de un comunicado publicado en su cuenta en la red social X.
Asimismo, ha manifestado que el paso de Masnaa «se ha convertido en el principal cruce a través del cual Hezbolá transporta medios de combate» después de los bombardeos ejecutados la semana pasada contra varios puestos fronterizos entre ambos países.
Adrai ha recalcado que Masnaa «es considerado un paso civil» que se encuentra bajo control de Líbano, tras lo que ha detallado que Hezbolá lleva cerca de una semana «intentando llegar a cabo, a través de su Unidad 4400, operaciones para transferir y enviar de contrabando armas sensibles» a través del cruce.
En este sentido, ha aseverado que las fuerzas israelíes bombardearon hace cuatro días «un camión cargado con armas» que se dirigía hacia Líbano desde Siria y ha añadido que «las imágenes muestran fuertes explosiones después del bombardeo, lo que indica la presencia de armas allí».
Por ello, ha recalcado que estas supuestas acciones por parte de Hezbolá «ponen en peligro a los ciudadanos de Líbano y sus intereses» y ha reiterado que «el Estado libanés es responsable de sus cruces fronterizos oficiales y puede impedir que Hezbolá pase por estos cruces».
«Las FDI no permitirán el contrabando de estas armas y no dudarán en actuar si se ven obligadas a hacerlo, como lo han hecho a lo largo de esta guerra», ha advertido, en referencia a que el Ejército de Israel podría llevar a cabo bombardeos contra estas instalaciones, pese a su carácter civil.
El repunte de las hostilidades se enmarca en los enfrentamientos desde hace cerca de un año, después de que Hezbolá atacara territorio israelí un día después de los ataques perpetrados el 7 de octubre de 2023 por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y otras facciones palestinas, que llevaron a Israel a desatar una cruenta ofensiva contra la Franja de Gaza.
Con información de Europa Press