Joe Biden, 46º presidente de Estados Unidos

MUNDO.- Joe Biden asumió como el 46º presidente de Estados Unidos, luego de prestar juramento en el Capitolio, en una ceremonia sin público y rodeada de grandes medidas de seguridad.

«Juro solemnemente que ejerceré fielmente el cargo de presidente de Estados Unidos».

Tras jurar el cargo, Biden, de 78 años, dijo en su primer mensaje como presidente:

«Hoy celebramos el triunfo de la democracia (…) es frágil, pero ha prevalecido».

Dijo que aún queda mucho para «curar» las heridas del país y aseguró que pocas veces ha habido momentos en la historia tan difíciles como el actual, por ello, reiteró el llamado a la unidad.

«Se necesitan mucho más que palabras. Se necesita, para una democracia, la unidad (…) Mi alma entera se va en esto: en volver a unir a Estados Unidos. Y pido a la ciudadanía se una a esta causa».

«Unidos podemos hacer lo correcto, podemos dar mejores empleos, garantizar la Salud a todos. Podemos hacer que Estados Unidos sea una fuerza para el bien al mundo (…) La historia, la fe, la razón, nos darán el camino».

También instó a confrontar el «extremismo político, el supremacismo blanco y el terrorismo doméstico».

«Seré un presidente para todos los estadounidenses».

Prometió que su Gobierno «reparará las alianzas» tradicionales del país y «se relacionará una vez más con el mundo».

Sobre la situación por el COVID-19, llamó a «hacer frente la pandemia como una sola nación».

«Necesitamos toda nuestra fuerza para perseverar, para avanzar adelante. Vamos a establecer políticas para enfrentar esta pandemia como una nación (…) Vamos a superar esto».

Pidió a los presentes en el Capitolio un instante de silencio y oración por todas las víctima del COVID-19.

Biden terminó su discurso de investidura prometiendo que actuará con «decencia», que protegerá la Constitución y dando las gracias al país.

Joe Biden tomó el timón de un país profundamente dividido y heredando una confluencia de crisis mayor que la enfrentada por ninguno de sus sucesores.   

La propia ceremonia en la que el poder presidencial fue transferido, una sagrada tradición democrática del país, sirvió como recordatorio discordante de los retos que Biden enfrenta: la investidura en un Capitolio que lleva las marcas de un sitio hace apenas dos semanas, rodeada por fuerzas de seguridad similares a las de una zona de guerra y sin muchedumbres debido a la pandemia de coronavirus.   

Quédense en casa, se les dijo a los estadounidenses, para prevenir una mayor diseminación del virus que ha cobrado más 400.000 vidas en Estados Unidos.

Biden asume ante una capital salpicada por tiendas vacías que reflejan el profundo efecto económico de la pandemia y en la que protestas en el verano ejemplificaron la renovada lucha en la nación contra la injusticia racial.   

Biden no fue aplaudido — ni siquiera reconocido — por su predecesor.   Desdeñando la tradición, Donald Trump partió de Washington el miércoles por la mañana antes de la investidura en lugar de acompañar a su sucesor al Capitolio.

Trump, quien será sometido a un segundo juicio político, se despidió animando a sus partidarios con la mentira de que la victoria de Biden fue ilegítima.   

Aunque no asistió a la ceremonia de investidura, Trump sí dejó en el Despacho Oval de la Casa Blanca una carta a su sucesor, tal y como manda la tradición, de acuerdo con la cadena Fox, que no detalló el contenido de la misiva.              

Al evento en el Capitolio llegaron tres expresidentes: George W. Bush y su esposa Laura fueron los primeros en arribar, varias horas antes de la ceremonia de investidura. Poco después llegaron Barack y Michelle Obama y Bill y Hillary Clinton, en caravanas por separado.

El otro exvicepresidente vivo, Jimmy Carter, de 96 años, había dicho que no asistiría.   

Biden, en su tercera contienda por la presidencia, centró su candidatura menos en una ideología política específica y más en unificar una coalición de votantes alrededor de la noción de que Trump representaba una amenaza existencial para la democracia del país.

En su primer día, Biden tomará una serie de acciones ejecutivas — sobre la pandemia, el clima, la inmigración y más — que buscan deshacer el corazón de la agenda de Trump.

Con información de FOROtv, AP y agencias / Foto: Twitter / 6w_es

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