Aprende a leer la tabla de información nutricional
¿Han tomado el tiempo de cuánto le dedican a la selección de productos en el súpermercado? Escoger alimentos entre precio, calidad, sabor y cantidad no debe ser nuestra decisión de compra, esta debe tomarse tras leer y analizar el etiquetado nutrimental y así elegir lo que sea más benéfico para nuestra salud, con un mayor aporte nutricional y menos grasas y azúcares.
La próxima vez que estemos en el súper y no sabemos si comprar el queso que nos gusta mucho, pero que está más caro o si el que tiene un sabor indiferente a al paladar, pero el precio es muy bajo por la cantidad que es, mejor veamos la información nutrimental y compremos el que menos grasa y calorías tenga. Al frente de los productos viene una pequeña tabla nutricional que indica lo que aporta dicho alimento, a continuación podrán ver un ejemplo de una lata de atún en agua:
- Una lata de atún tiene 100 gramos de masa drenada, su tabla nutricional muestra lo que aporta una sola porción de 50 gramos, por lo que una lata cuenta con dos porciones por envase. Aquí es importante analizar cuántas porciones tiene un producto y de cuántos gramos es cada porción y así saber la cantidad saludable a consumir.
- Las grasas saturadas y trans son las que se debemos evitar, ya que son las que elevan los niveles de colesterol en la sangre. Mientras que el consumo de grasas en general debe ser mínimo, el cuerpo la necesita para su desarrollo y rendimiento, por esto es mejor optar por grasas saludables como la del aguacate o el aceite de olivo.
- Los azúcares se refiere a los carbohidratos simples y los complejos. Los complejos son los que podemos encontrar en el almidón de la papa o el camote, mientras que los simples son la glucosa, fructosa y sacarosa, y su consumo debe ser mínimo.
- El consumo excesivo de sodio provoca hipertensión arterial, la recomendación máxima diaria es de 2,400 mg. En este caso una porción de esta lata de atún aporta 145 mg de sodio, la lata completa tiene un total de 290 mg de sodio.
- La medida de kilocalorías que se usa para la energía se obtiene como resultado de las grasas totales, carbohidratos, proteínas y alcohol. Debemos considerar este valor energético dentro del conteo de calorías de nuestra dieta diaria, así no exceder el consumo de estas en una comida y al día.
