MÉXICO.- Tres periodistas que habían sido secuestrados en Guerrero fueron puestos en libertad, informó la fiscalía del estado golpeado por la violencia ligada al crimen organizado.
Los reporteros Silvia Nayssa Arce, Alberto Sánchez y Marco Antonio Toledo fueron liberados gracias al «reforzamiento de los operativos de búsqueda y el despliegue de autoridades» estatales y federales, indicó la fiscalía de Guerrero en comunicado.
La aparición de los periodistas «se confirma después de que esta institución de procuración de justicia obtuvo la prueba de vida y la comparecencia de las víctimas ante el Ministerio Público correspondiente», agrega el boletín.
La fiscalía estatal confirmó también la liberación de la esposa del reportero Toledo, Guadalupe Denova, pero señaló que el hijo de la pareja, Alberto Toledo Denova, quien fue secuestrado junto a sus padres, permanece sin localizar.
En tal sentido, aseguró que personal del ejército, la policía y la Guardia Nacional mexicanas «continúan con los operativos de búsqueda» para encontrarlo, según indica el comunicado.
Marco Antonio Toledo, quien es director del semanario local El Espectador y corresponsal de diversos medios, fue secuestrado el 19 de noviembre en la ciudad de Taxco, mientras que Arce y Sánchez, reporteros del medio digital RedSiete, habían sido raptados el miércoles 22 en la misma localidad.
México es considerado uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo, según la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF).
Apenas el 16 de noviembre, el fotoperiodista de El Heraldo de Juárez, Ismael Villagómez, fue asesinado de un balazo en la fronteriza Ciudad Juárez (norte).
Hasta el momento hay tres personas detenidas por el homicidio.
Al menos otros cinco periodistas han sido asesinados en México en 2023, según la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF). Las autoridades investigan si estos hechos están relacionados con su labor informativa.
Con información de AFP