MÉXICO.- Lucy tiene una hermosa sonrisa. Esa sonrisa que todos pudimos observar justo cuando fue rescatada.
Y es que Lucía permaneció 36 horas bajo los escombros del edificio de Álvaro Obregón 286, que se derrumbó el 19 de septiembre del 2017, luego del terremoto que sacudió a la Ciudad de México aquel día.
«No llegamos ni a la mitad del camino cuando vimos el techo desplomarse a nosotros (…) se nos vino encima el techo, yo lo que hice fue como cubrirme, traía el celular en la mano y sentí un ruido muy fuerte y en segundos yo ya estaba cubierta», dijo Lucía Zamora.
Apenas unos días después de su rescate, en conversación con Paola Rojas, Lucy recordaba cómo hizo para sobrevivir bajo los escombros.
«Yo recuerdo que yo estaba como un poco inclinada y no podía respirar, y conforme pasó el tiempo Isaac y yo nos hicimos espacio pues entre los escombros para poder estar lo más cómodos posibles».
Además de su gran fortaleza, Lucy estuvo acompañada de Isaac, un compañero de trabajo, quien sin duda, permanecerá en su memoria y en su corazón.
«Para mí mi héroe también porque estuvimos hombro con hombro, nos dábamos fuerza desde donde podíamos. Él decía que vio mucho por mi integridad física y eso no sabes cuánto lo agradezco. (…) Platicábamos mucho, rezábamos juntos y pedíamos auxilio juntos».
En el edificio ubicado en el número 286 de la calle Álvaro Obregón fueron rescatadas 27 personas de entre los escombros, mientras que otras 49 lamentablemente fallecieron.
Será por eso que Lucy desde el primer instante se sintió afortunada y con la misión de hacer algo en esta segunda oportunidad que le dio la vida.
«Me siento con la misión de hacer algo, todavía no sé desde donde, todavía no se exactamente cómo», dijo.
Para Lucía, la vida no ha sido fácil. Quedó huérfana desde pequeña, por lo que sólo tiene a su hermana. Así que las muchas preguntas a Dios en las horas de espera, estuvieron ahí, siempre.
«¿Le preguntaste qué? Qué quieres que haga allá afuera, por qué me pones en esta situación, qué es lo que quieres de mí, ya he pasado por muchas cosas, ahora qué más quieres que yo haga. (…) Empieza a llegar, empieza a llegar, no sé muy bien el cómo, pero empieza a llegar».
Y probablemente llegaron todas, o casi todas las respuestas.
Porque Lucía Zamora se convirtió en conferencista. Cambió de oficio y de residencia. Vive en Madrid, donde estudia un máster en Escritura. De hacer trabajo en Consultoría de Mercado, ahora escribe. Tiene un blog «Letras con Chocolate».
Asegura que ha encontrado en la escritura su forma de vida.
En entrevista con Paola Rojas, Lucy habló sobre la misión que ahora encabeza.
«A dos años de distancia para mí el mensaje fue ‘haz lo que amas, haz lo que te gusta’. Y pues eso es escribir y me fui a estudia a Madrid, escritora creativa y encontrar mi voz, encontrar eso que me sacudió y fue ‘haz con tu vida eso que siempre has querido hacer’, y posponemos y posponemos esos sueños que no deberíamos posponer».
Contó que para seguir sus sueños, dejó a su familia en México, pero «con esa convicción de que estoy haciendo lo que yo quiero y realmente te puedo decir que soy muy plena».
Dijo que al recordar los momentos que pasó atrapada entre los escombros, vino a su mente el pensamiento de que no podía morir en ese lugar «porque tengo muchas cosas por hacer».
«Ese mensaje no lo tienes siempre, porque vivimos en la rutina, vivimos en el día a día, vivimos con prisa y hasta que tienes ese momento de decir ‘la vi cerca, pude no hacer lo que estoy haciendo’, creo que es cuando te aferras tanto a vivir tan intensamente y tus sueños».
Lucy afirmó que esta es una nueva oportunidad.
«En mi vida he tenido nuevos resurgimientos, este fue con todo. Soy alguien totalmente diferente, cómo ve la vida, cómo ve la muerte también y cómo te apasionas por aquello que te llama», agregó.
Con información y foto de Noticieros Televisa
