MUNDO.- La región de Kemerovo, en Siberia, (sureste de Rusia) comenzó este viernes el primero de los tres días de luto tras la muerte de 52 personas, incluidos seis rescatistas, en un accidente en una mina de carbón.
Los investigadores detuvieron el jueves a los responsables de la mina por incumplimientos que llevaron a la catástrofe, una de las peores de los últimos diez años, en un sector en Rusia donde estos dramas son habituales.
La alarma saltó el jueves, hacia las 08H30, hora local (01H30 GMT), después de que se detectara humo en la mina de Listvyazhnaya, en la ciudad de Gramoteino (Kemerovo), una zona con numerosas minas de carbón.
Las autoridades locales afirman que 285 personas se encontraban en ese momento en la mina. Aunque se pudo rescatar a la mayoría, 46 personas quedaron atrapadas a cientos de metros bajo tierra.
El jueves, con la caída de la noche, las autoridades anunciaron que no había supervivientes entre los que se habían quedado atrapados bajo tierra. También comunicaron la muerte de seis rescatistas espeleólogos.
El viernes, el ministro interino de Situaciones de Emergencia, Alexander Chupriyan, afirmó en televisión que otro minero fue rescatado con vida.
Los seis rescatistas fallecidos serán condecorados con la medalla al valor a título póstumo, anunció Chupriyan. «Tanto los mineros como los rescatistas cumplieron con su deber hasta el final», declaró el ministro en un comunicado.
Según un responsable de la fiscalía, citado por las agencias de prensa rusas, la investigación considera que el accidente se produjo por una explosión de grisú, un gas que se da cuando el metano se mezcla con el oxígeno.
Cincuenta personas se encuentran hospitalizadas tras el accidente, según el ministro local de Salud.
Los investigadores, que exploran la vía de «violación de las normas de seguridad», anunciaron el jueves la detención del director de la mina, de su ayudante y del responsable de la zona donde tuvo lugar el accidente.
La mina pertenece a la sociedad SDS-Ugol (propiedad del millonario Mijaíl Fediaev), uno de los mayores productores de carbón en Rusia.
El viernes, dos responsables de los servicios de inspección de sitios industriales fueron puestos bajo investigación por «negligencia».
«Es una gran tragedia», declaró el jueves el presidente ruso Vladimir Putin, por televisión.
Los accidentes en minas rusas se dan, a menudo, por la relajación en las normas de seguridad, la mala gestión o el uso de vetustos equipos de la época soviética.
La mina de Listvyazhnaya ya sufrió dos accidentes en el pasado. En octubre de 2004 una explosión de metano mató a 13 personas. Los medios rusos mencionan otra explosión en 1981, que dejó cinco fallecidos.
En mayo de 2010, un accidente en la mina de Raspadskaya, también en la región de Kemerovo, dejó 91 muertos y un centenar de heridos.
Con información de AFP