Ciudad de México.- Aún cuando no se conocen los efectos precisos que la reforma fiscal de los Estados Unidos tendrá sobre México, la presidente nacional del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) afirmó que México también necesita una reforma en la materia en miras a generar una base tributaria más amplia, proporcionar mayor seguridad jurídica y fomentar la inversión.
En conferencia con medios, la presidenta nacional del IMEF, Adriana Berrocal, indicó que sí hay margen para reducir el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y bajar el Impuesto al Valor Agregado (IVA) de 16 a 15 por ciento, pero hacerlo generalizado.
Añadió que se debe proponer una tasa competitiva de impuestos para que los inversionistas prefieran pagarlos en México; no obstante, aclaró que la tasa impositiva no es lo único que detona la competitividad de México.
En este sentido, Berrocal agregó que debemos generar los incentivos para mejorar nuestra competitividad con el desarrollo de ventajas de largo plazo adicionales a los bajos costos laborales, así como sumar un uso más eficiente y transparente de los ingresos tributarios para que el aumento en la recaudación se refleje en mayor inversión productiva.
Además, abundó, es urgente elevar la calidad del gasto para convertirlo en fuente de desarrollo económico y no en preocupación por la debilidad de las finanzas públicas, ya que todo esto no depende de una acción en el extranjero.
Con respecto a la incertidumbre que podría generar el proceso electoral del próximo año, el presidente nacional de estudios económicos del IMEF, Gabriel Casillas, dijo que ésta es “bienvenida “, pues nadie quiere regresar a los tiempos en los que se daba por hecho quién iba a ganar los comicios.
Agregó que otros mercados emergentes no son tan atractivos como México y eso se refleja en la tenencia de bonos en manos de extranjeros, derivado de la confianza de los inversionistas internacionales.
Fuente: Milenio
