MÉXICO.- La única propuesta consolidada para intentar el rescate de los mineros de «El Pinabete» es la construcción de un tajo con el que tardarían seis meses en llegar a la galería donde se encuentran atrapados.
“Es abrir la tierra, es bajar 60 metros para encontrar a los mineros, sería un rescate que podría iniciarse a los seis meses de iniciado el tajo y de ahí hasta la conclusión de la obra cerrar la mina serían 11 meses”, precisó Laura Velázquez, coordinadora nacional de Protección Civil.
La construcción del tajo no tenía fecha hasta este fin de semana debido a que, según la CNPC, los familiares de los mineros no habían avalado el plan. Lo que ellos pedían era la extracción de toda el agua e ingresar a los pozos para rescatarlos.
“Esto no es posible, o si es posible, pero llevaría 24 meses sacar toda el agua de estas minas, pero además de todo esto no es nada más extraer agua, el tema es que puede haber un gran riesgo de colapso; si ellos no están de acuerdo no podemos iniciar y pues se los digo, ya llevamos dos días perdidos”, señaló Laura Velázquez, coordinadora nacional de Protección Civil.
Fue descartada la propuesta de inyectar cemento o polímeros en la pared de lámina 6 y «El Pinabete» para evitar filtraciones e iniciar los trabajos de rescate ante la posibilidad de un colapso.
FAMILIARES DE MINEROS ACEPTAN PLAN PARA RESCATE
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reveló el domingo 28 de agosto que las familias de los 10 mineros que el pasado 3 de agosto quedaron atrapados en una mina en el estado de Coahuila ya aceptaron el plan para su rescate, el cual tardará algunos meses.
“Mandamos consultar con familiares se pusieron muy tristes, es una situación muy difícil, mucho muy difícil, estaban muy alterados, no querían nada, y ya, pues han aceptado”, apuntó el mandatario durante un encuentro con trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en Nuevo León.
López Obrador aseguró que “hay un consenso” entre las 10 familias de los trabajadores que quedaron atrapados tras el accidente en el municipio de Sabinas, donde el pasado 3 de agosto el sitio en el que laboraban los mineros se inundó tras un derrumbe de una mina contigua abandonada, Conchas Norte.
“(Los familiares) están de acuerdo que se lleve a cabo este trabajo y no aceptaban por el tiempo, porque nos va a llevar más tiempo el rescate y ellos quisieran que fuese lo más pronto posible”, apuntó el mandatario.
Explicó que su Gobierno consultó con especialistas de Alemania y Estados Unidos quienes propusieron un rescate “haciendo unos tajos”, y que de esta manera se puede hacer la operación.
Esta propuesta de rescate de la Coordinación de Protección Civil prevé tardar 11 meses en recuperar los cuerpos de los trabajadores.
No obstante, López Obrador aseguró que se han comprometido “a trabajar con mucha rapidez para sacar los cuerpos” y pidió a los ingenieros de la CFE “que se apliquen en esto”.
Además, dijo al subsecretario de Hacienda, Juan Pablo De Botton, que otorgue los recursos que se requieren “porque vamos también a pagar la indemnización a los familiares, y no la indemnización convencional, sino se les va a ayudar con más a los familiares”, aseveró.
Asimismo, el presidente recordó que se sigue trabajando en el rescate de los 65 mineros que quedaron atrapados en 2006 tras un derrumbe en la mina de Pasta de Conchos, en Coahuila.
Señaló que hizo el compromiso de rescatarlos, aunque intentó pactar con los familiares una indemnización y la adquisición de todo el terreno donde estaba la mina para hacer un memorial; sin embargo, no todas las familias accedieron, por lo que los técnicos de la CFE siguen trabajando en el rescate.
“Nos están ayudando en el rescate es una inversión porque no es gasto, ya se empezó el trabajo de excavación nos va a llevar todavía como dos años más llegar abajo y rescatar los cuerpos”, reconoció.
Estos accidentes han reactivado la polémica en México por la actuación de las mineras en la región carbonífera, donde se han registrado más de 100 muertes de personas dedicadas a la minería, de acuerdo con la Familia Pasta de Conchos, que agrupa a familiares de fallecidos en el derrumbe de 2006 en la mina de ese nombre.
Con información de N+ / Carlos Guerrero / EFE