MUNDO.- Economista y ganador del Premio Nobel de la Paz, Muhammad Yunus, ha sido internacionalmente reconocido por su revolucionario sistema de micro-créditos y con los cuales ha ayudado a millones de personas de escasos recursos, principalmente mujeres.
Nació en Bangladesh en 1940, estudió Ciencias Económicas en Nueva Delhi y amplió sus conocimientos en Estados Unidos mediante becas de distintas universidades como Vanderbilt, en Tenesse.
De vuelta en Bangladesh convivió con los campesinos de la zona de Jobra, donde pudo ver cómo la pobreza era un mal generalizado.
Creó los denominados “microcréditos” y posteriormente el Banco Grameen o el Banco de los Pobres, que ofrecía créditos a las personas más desfavorecidas y las convertía en accionistas de la propia institución.
El Banco funciona en la actualidad con más de 22 mil empleados que trabajan en las calles de casi 38 mil aldeas y pueblos de Bangladesh, y concede préstamos a 2,3 millones de personas, de los cuales el 94 por ciento corresponden a mujeres pobres.
En 2006, Yunus y la institución que creó Banco Grameen, fueron galardonados con el premio Nobel de la Paz “por su lucha por una economía justa para las clases pobres”.
«Siempre me he concentrado en la gente pobre para promover la idea de los microcréditos para que la gente supere la pobreza. Yo siempre he dicho que la pobreza no la genera la gente pobre, sino el sistema, y si no cambiamos el sistema la pobreza prevalecerá por mucho que luches contra ella», dijo en entrevista con Paola Rojas.
Señaló que en este momento la riqueza se concentra en manos de muy pocos.
«Del 1% de la población, de manera que el otro 99 por ciento no comparte esta riqueza. Estamos hablando de una pirámide enfermiza, es como si lo tuvieras todo en las puntas de los dedos. Estamos hablando de un sistema obsceno y lo vemos a nivel global, lo vemos en Estados Unidos (…) en México, en Bangladesh, en la India».
Señaló que la estrategia de algunos gobiernos de repartir el dinero entre los pobres no es una solución a la pobreza.
«Puede ser una medida desesperada, pero esa no es una solución. Estar entregando dinero no resuelve el problema para los pobres, los pobres tienen que generar su propia riqueza, no tienen que ser mendigos. No queremos un mundo que genera mendigos, que extienden la mano para recibir dinero. Lo que quieres es que la gente se pare sobre sus propias fuerzas. Hacer de todos emprendedores», indicó.
Con información de «Al aire con Paola» / Foto: A.M.Ahad