MUNDO.- Cientos de miles de personas salieron este lunes a las calles de todo Myanmar en la mayor jornada de protestas contra la junta militar desde el golpe de Estado. El trágico fin de semana que terminó con dos personas muertas producto de los disparos de la Policía.
El bloqueo de internet, el corte de calles y las amenazas de los militares de que habrá más muertes, no frenó a los ciudadanos, que salieron a manifestarse desde la mañana en una convocatoria de huelga que ha paralizado el país.
Hasta ahora, las protestas masivas inundaron las principales arterias de Rangún, la ciudad más poblada, Naipyidó y Mandalay, escenario de la sangrienta represión del fin de semana, así como otras muchas localidades a lo largo y ancho de la nación. Los asistentes reclamaron el restablecimiento democrático y la liberación de los presos políticos, que ya superan los 600, entre los que se incluye a la líder electa Aung San Suu Kyi.
Aunque en general las protestas se celebraron de manera pacífica, en Naipyidó se vivieron los mayores altercados, según vídeos publicados por los activistas en las redes sociales, que mostraban a la Policía persiguiendo a los manifestantes, mientras se produjo un número sin confirmar de detenciones.
Junta militar advierte que manifestantes se arriesgan a morir
Ante la convocatoria de este lunes, la junta militar volvió a dejar sin internet al país una noche más y restringió el uso de datos durante la mañana, además de cortar varias arterias de Rangún y Naipyidó para impedir el acceso a los puntos especialmente concurridos durante las protestas.
En respuesta a estas muertes, que ya suman tres fallecidos, la junta militar acusó a los manifestantes de «aumentar su incitación a la revuelta y a la muchedumbre anárquica» y les advirtió de que se podrían perder más vidas.
Revolución 22222
La convocatoria de este lunes ha recibido el nombre de «la revolución 22222» al celebrarse el 22.2.2021, en referencia a las protestas contra la junta militar del 8 de agosto de 1988, conocida como la revolución 8888, que fue violentamente reprimida por las fuerzas de seguridad.
Con las dos muertes del fin de semana son ya tres los fallecidos por la violenta respuesta de las fuerzas de seguridad, después de que el viernes falleciera tras 10 días hospitalizada Mya Thwe Thwe Khine, una joven de 20 años que recibió un disparo policial en la cabeza durante una protesta, y cuyo funeral se celebró el domingo en Naipyidó.
Con información de EFE / Foto: Reuters