MÉXICO.- En Chiapas, elementos del Instituto Nacional de Migración y de la Guardia Nacional, realizaron un nuevo operativo para frenar la tercera caravana de migrantes, que salió de Tapachula, con la intención de llegar al norte de México y cruzar a Estados Unidos.
Los migrantes en su mayoría haitianos, venezolanos y centroamericanos salieron el jueves del municipio de Huixtla, donde descansaron después de caminar más de 40 kilómetros desde Tapachula.
En este lugar personal de Protección Civil municipal les brindó atención médica y la pastoral de la Iglesia Católica les dio algo de comer.
“Vienen muy lesionados de sus pies, traen llagas, entonces se les da principalmente la atención en esa parte del cuerpo, en los pies”, dijo Carlos López, delegado de Protección Civil de la región Soconusco.
“Ojalá que la inmigración nos deje pasar, porque ahora yo tengo los pies hinchados, sino solamente yo sino todos los compañeros de nosotros, estamos todos así cansados, con hambre aburrido y desesperado.”
Mujeres y niños salieron de madrugada
Hombres, mujeres y niños salieron de madrugada y caminaron 28 kilómetros en siete horas, bajo los rayos del sol y con una temperatura de 40 grados a la sombra.
Seis kilómetros antes de llegar al municipio de Escuintla alrededor de 80 agentes de migración y 150 elementos de la Guardia Nacional instalaron un retén a la altura de la comunidad San Felipe Tizapa, para evitar que los migrantes siguieran avanzando.
Al ver la presencia de los agentes federales, muchos de los migrantes comenzaron a correr para esconderse y otros se internaron en los potreros a las orillas de la carretera, sin embargo, unos 30 migrantes fueron detenidos.
“Yo tengo problema con Migración como visitante, no dejan pasar; un problema, no hay trabajo, no hay vida, sino hay trabajo no hay comida”, relató Jefrey Lusey, migrante haitiano.
El Instituto Nacional de Migración informó que se busca instalar un campamento humanitario a favor de personas migrantes haitianas que permanecen en Chiapas.
La dependencia señaló que se ha iniciado el proceso de comunicación y acuerdos con Acnur-México y la Dimensión Episcopal de Pastoral de la Movilidad Humana para brindar espacios y servicios a personas que están a la espera de una resolución de refugio o asilo.
Con información de Noticieros Televisa / Juan Álvarez