MUNDO.- El senador por Texas Ted Cruz dijo el jueves que sus vacaciones familiares a México «obviamente» fueron un error, luego de que regresó a su estado tras una ola de indignación por su ausencia durante una intensa tormenta invernal que ha dejado decenas de muertos en Estados Unidos.
Cruz manifestó que comenzó a dudar sobre la pertinencia de realizar el viaje desde que subió al avión el miércoles.
«En retrospectiva, no lo hubiera hecho», declaró a reporteros.
The Associated Press y otros medios de comunicación reportaron que el senador había viajado fuera del país con su familia en momentos en que cientos de miles de texanos siguen lidiando con los estragos causados por una tormenta invernal que afectó el suministro eléctrico en el estado.
El viaje provocó críticas de miembros de ambos partidos políticos y se piensa que posiblemente perjudicó sus ambiciones políticas.
En un comunicado previo el jueves, Cruz afirmó que acompañó a su familia a Cancún, México, después que sus hijas le pidieron irse de viaje con unas amigas, dado que las clases se suspendieron por el resto de la semana.
«Queriendo ser un buen padre, viajé con ellas anoche y estoy volando de regreso esta tarde», escribió Cruz.
«Mi personal y yo estamos en constante comunicación con las autoridades estatales y locales para llegar al fondo de lo que ocurrió en Texas», aseveró.
«Queremos que regrese nuestra electricidad, nuestra agua, y que nuestras casas vuelvan a estar calientes».
Cruz les dijo a los reporteros el jueves por la noche que regresó a Estados Unidos porque se percató de que necesitaba estar en Texas. Añadió que originalmente había programado quedarse en México todo el fin de semana.
«No quería que todos los gritos por este viaje distraigan ni siquiera por un momento de los verdaderos asuntos que me parece le importan a los texanos, que es mantener a todas nuestras familias a salvo», señaló Cruz.
«Obviamente fue un error, y en retrospectiva, no lo hubiera hecho», agregó.
Las intensas críticas surgieron en un contexto en el que Cruz pretende intentar de nuevo obtener la candidatura presidencial republicana en 2024.
Ya era uno de los republicanos más vilipendiados en el Congreso, habiendo hecho adversarios de todo el espectro político con una carrera definida por políticas de extrema derecha y disputas con la dirigencia de su partido.
Hace poco emergió como figura en el intento del expresidente Donald Trump de revertir los resultados de las elecciones presidenciales celebradas en noviembre del año pasado. Y hace unas semanas, había letreros a lo largo de las autopistas de Texas en los que se pedía su renuncia. Incluso el presidente del Partido Republicano estatal se rehusó a salir en defensa de Cruz el jueves.
«Eso es algo que él tiene que responder a sus electores», dijo Allen West, presidente del Partido Republicano de Texas, luego de que le preguntaron si el viaje de Cruz era algo adecuado mientras los texanos no tenían luz ni agua.
«Estoy aquí tratando de cuidar de mi familia y de mis amigos y de otras personas que se quedaron sin electricidad», señaló West.
«Estoy enfocado en eso».
Cientos de miles de personas de Texas se despertaron el jueves sin electricidad por cuarto día, y con una crisis de agua en desarrollo, ya que la tormenta invernal causó estragos en la red eléctrica y otros servicios básicos en el estado.
Las autoridades de Texas ordenaron que 7 millones de personas, una cuarta parte de los habitantes del segundo estado más poblado de la nación, hirvieran el agua potable antes de beberla, puesto que las bajas temperaturas han dañado la infraestructura y congelado las tuberías.
En Austin, algunos hospitales lidiaban con la pérdida de presión del agua y, en algunos casos, de calefacción. La noticia de la ausencia de Cruz rápidamente tuvo eco en el estado. Livia Treviño, una mujer de 24 años cuya vivienda en Austin seguía sin agua el jueves, dijo que se sentía abandonada por los líderes gubernamentales.
«Están tomando vacaciones y yéndose del país, de forma que no tengan que lidiar con esto, y nosotros nos estamos muriendo de frío. No tenemos agua y no tenemos comida», afirmó.
En su comunicado, Cruz señaló que su familia también se había quedado sin calefacción y sin electricidad.
«Esta ha sido una semana exasperante para los texanos», escribió. Si bien la situación no ayuda a su futuro político, Cruz, que se encuentra en su segundo término, no corre ningún peligro político inmediato. Su periodo actual expira a principios de 2025, y el comienzo no oficial de las siguientes elecciones primarias presidenciales del Partido Republicano está a dos años de distancia.
De todas formas, los demócratas en Washington se mostraron muy dispuestos a hablar sobre la controversia. Una de las mayores críticas de Cruz, la representante Alexandria Ocasio-Cortez, alentó a sus partidarios el jueves a ofrecerse como voluntarios para un servicio telefónico de verificación de condiciones con el fin de ayudar a los texanos afectados por la tormenta.
«Muchos líderes electos en Texas le han fallado a sus electores», escribió la demócrata en un correo electrónico. «En lugar de enfocarse en ayudar, han preferido aparecer en Fox News para difundir mentiras o abordar un avión a Cancún».
Horas antes, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, tomó una pregunta sobre el «paradero» de Cruz.
«No tengo ninguna actualización de la ubicación exacta del senador Ted Cruz ni tampoco la tiene nadie en la Casa Blanca», respondió Psaki, y añadió que el gobierno del presidente Joe Biden está enfocado en «trabajar directamente con las autoridades de Texas y de estados aledaños para hacer frente a la tormenta invernal y a la crisis en curso».
La oficina de Cruz rechazó responder preguntas específicas sobre las vacaciones de la familia, pero su personal contactó al Departamento de Policía de Houston el miércoles por la tarde para informar que el senador llegaría al aeropuerto, de acuerdo con Jodi Silva, portavoz del departamento policial. Agregó que los agentes «vigilaron sus movimientos» mientras Cruz estaba en el aeropuerto.
Silva no dijo si ese tipo de solicitudes son habituales para los viajes de Cruz o si su personal había hecho antes una solicitud parecida para su vuelo de regreso.
Los oficiales de la Policía del Capitolio federal y el sargento de armas del Senado han pedido a los legisladores y a su personal que sean conscientes de posibles amenazas y que consideren informar a las autoridades sobre sus viajes en aeropuertos y otros centros de transporte.
La oficina de Cruz no señaló por el momento si el senador se pondría en cuarentena. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades han pedido a la gente que ha viajado que se realice una prueba de coronavirus de tres a cinco días después de su regreso y que se ponga en cuarentena por una semana, sea cual sea el resultado de sus pruebas.
Cruz documentó para su vuelo de regreso el jueves por la tarde en Cancún y caminó rápidamente por la terminal jalando una maleta hacia la zona de seguridad. Vestía una camiseta, jeans y una mascarilla diseñada como la bandera de Texas.
El senador iba acompañado por un hombre que hablaba español y que portaba una camiseta negra con el nombre y el logotigo de la cadena hotelera The Ritz-Carlton.
Cruz comentó a los reporteros que planeaba «ir a casa y seguir trabajando para que se reabra la red, para que se restablezca la electricidad y vuelva el agua». «Muchos texanos están sufriendo y esta crisis es frustrante. Es frustrante para millones de texanos. No debería de suceder» algo así, dijo.
Con información de AP / Foto: Reuters