MÉXICO.- La casa donde la semana pasada fue detenido Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán, se localiza en la parte alta de Jesús María, sindicatura de Culiacán, Sinaloa.
Solo existe un camino de terracería para llegar al inmueble ubicado a un costado de un gran tanque para almacenamiento de agua elevado.
Sobresale entre las casas que hay en la sindicatura.
Ahí vivía Ovidio, con sus tres hijas menores, su esposa, una niñera y servidumbre.
Se dice que la casa fue heredada a los tres hijos de «El Chapo» Guzmán y recién fue remodelada; aún se observan materiales de construcción.
Tiene un amplio portón café, un acceso de estilo rústico y los techos son de palma y teja roja, hay cuarto de servicio, además de lavandería.
A la entrada hay un amplio jardín, destaca una gran palapa, hay asadores de carne y lugar de estacionamiento para por lo menos ocho camionetas, que dicen son la pasión de Ovidio.
El terreno está delimitado por una malla ciclónica cubierta que imposibilita la vista al rancho.
Tras el operativo se aprecian impactos de bala y cientos de casquillos percutidos que dan muestra de la magnitud del enfrentamiento.
En el patio quedaron dos camionetas baleadas y dos cuatrimotos.
El operativo para la captura de Ovidio Guzmán inició alrededor de las 4 de la mañana del pasado jueves cuando los habitantes de Jesús María despertaron por el sonido de miles de disparos.
“Los primeros disparos empezaron a las 4:20 a.m. yo abrí la puerta porque pensé que eran cuetes abrí la ventana y miré a todos los soldados que iban bajando iban por aquí por la casa y por esa puerta entraron (…) Toda la mañana empezaron a tirar y a él se lo llevaron”, dijo un habitante de Jesús María.
«Nosotros estábamos debajo de la cama, fue una balacera fea y a toda la redonda de mi casa, todo (…) yo estaba despierta, como ellos son pescadores ya mi nuera había hecho tortillas, ya iba guisar para mi hijo para ir a trabajar cuando se oyó balazos”, comentó un habitante de Jesús María.
Alrededor del rancho quedaron más de 15 camionetas que sirvieron como barricada para impedir el ingreso del personal militar.
“Ahorita estamos haciendo la evacuación de los vehículos que participaron en la agresión contra el personal militar que son varios de los vehículos, están blindados y tienen para emplazar armas colectivas”, indicó Cristóbal Castañeda Camarillo, secretario de Seguridad Sinaloa.
En al menos otras 35 unidades abandonadas, los pistoleros llevaban la insignia de un ratón en honor a Ovidio.
El rancho continúa bajo resguardo de las autoridades federales.
«Aquí fue un operativo federal, la autoridad federal es la encargada (…) Participaron las fuerzas armadas y ellos son los que tienen el resguardo del área”, indicó Cristóbal Castañeda Camarillo, secretario de Seguridad Sinaloa.
La sindicatura de Jesús María forma parte de la zona serrana de Sinaloa, se encuentra a poco más de 30 kilómetros de Culiacán y la población en su gran mayoría se dedica a la pesca.
Con información de N+ / Erika Palma