MUNDO.- Uno de los atentados más recordados en España, perpetrado por la banda terrorista ETA, fue el que sufrió Irene Villa junto a su madre, María de Jesús González en 1980.
Cuando iban rumbo al colegio, teniendo Irene apenas 12 años, sufrieron un grave atentado. Una bomba estalló en su auto. Su madre perdió una pierna y un brazo, y ella las dos piernas y tres dedos de una mano.
Su madre era funcionaria de la Dirección General de Policía en Madrid; su padre, Luis Alfonso Villa, era taxista.
A pesar del dolor y la pérdida, la joven logró rehacer su vida. Estudió Comunicación Audiovisual en la Universidad Europea de Madrid, también realizó estudios de psicología y humanidades.
En el 2004 escribió su primer libro «Saber que se puede», en el que plasma su testimonio de vida. Hasta la actualidad tiene tres libros escritos.
Como periodista, es columnista de prensa y colabora en distintas emisiones de radio y televisión.
Una mujer que logró el éxito en todos los ámbitos, es madre de tres hijos: Carlos Andrés, Pablo Gael y Eric Adriano.
En el deporte, es esquiadora alpina paralímpica, formando parte del primer equipo femenil de esquí adaptado en España y logrando campeonatos nacionales e internacionales.
Irene es ejemplo de vida y resiliencia, tan es así que hoy en día es considerada una de las exponentes de superación personal más importantes de su país y del mundo.
«Saber que se puede» también es el nombre de la serie de conferencias que Irene da por el mundo.
«Es un mensaje maravilloso de una canción que me inspiró, de Coti, ‘Color de esperanza’… cuando yo escuché esa canción me transmitió mucha esperanza, mucha alegría, muchas ganas de vivir, de mejorar mi vida. Dije ‘voy a escribir un libro que también dé esa energía al que lo lea’. (…)Al final la clave de la vida es creer lo que tú quieres crear, creer en ti y saber que se puede».
Irene afirma que una de las claves para poder seguir en la vida es perdonar, pues tras ser víctima de un ataque de odio ella decidió perdonar.
«Es fundamental no contagiarte de esa energía tan negativa y yo desde muy pequeña decía ‘si ya bastante tengo con aprender a caminar con prótesis, cómo voy a tener que cargar también con el odio y el rencor’, eso es una carga y una discapacidad muchísimo más grande. Dije ‘no me lo puedo permitir’. Nadie se lo puede permitir. El no perdonar al único que hace daño es al que no perdona».
Asimismo, destacó que lo más importante es dejar atrás lo ocurrido y hacer las cosas con amor.
«Si tú haces lo que hagas con amor, el paso que tengas que dar (…) si lo haces con cariño y con amor no te equivocas».
Sobre los líderes mundiales que basan su discurso en el odio, agregó:
«Divide y vencerás, es lo más negativo. Ojalá fuéramos conscientes de lo iguales que somos el ser humano en cualquier punto del mundo. (…) Si todos fuéramos humanistas yo creo que el mundo giraría mucho más sano, mucho más agradecido, mucho más feliz. El mensaje que debemos dar es el cariño y ayudarnos unos a otros».
Con información y foto de Noticieros Televisa
