Ciudad de México. – La cinta ROMA de Alfonso Cuarón por fin se proyectó en Los Pinos este jueves 13 de diciembre, previo a su estreno en Netflix.
La cinta de Alfonso Cuarón por fin se proyectó ante más de 3 mil personas que resistieron el frío y el dolor de pies o de espalda por haberse formado más de dos horas.
Sin embargo, el gran protagonista de esta noche no fue Alfonso Cuarón. Fueron Los Pinos. Allí donde cientos de veces aterrizó Enrique Peña Nieto en su helicóptero, el pueblo se sentó, acomodó su petate, sacó el ponche y se dispuso a ver el retrato de un México que no se ha transformado del todo.
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— Secretaría Cultura (@cultura_mx) 14 de diciembre de 2018
Quien llegó con dos o más horas de anticipación pudo ver a Yalitza Aparicio merodeando cerca de la pantalla de 120 metros cuadrados en la que se proyectó la cinta, que recientemente fue nominada a los Premios Goya como Mejor Película Iberoamericana.
Los primeros en llegar, les ofrecieron llenar sus termos de ponche y repetir palomitas. Sin embargo, los impuntuales tuvieron que conformarse con sentarse en el pasto y escoger el mejor lugar posible, porque sólo se consiguieron 800 petates y los asistentes fueron más, muchos más que los 3 mil anunciados por la Secretaría de Cultura.
¡Gracias a @YalitzaAparicio y @MarDeTavira por acompañarnos a la función de @ROMACuaron en el Complejo Cultural Los Pinos! 🎥#ROMAenLosPinos 🍿 pic.twitter.com/zyVjffrgEz
— Secretaría Cultura (@cultura_mx) 14 de diciembre de 2018
Roma duró 135 minutos, pero la conmoción de los asistentes duró mucho más. No sólo porque encontraron en «Cleo» un fiel reflejo de la invisibilidad de las clases más vulnerables del país, sino porque todo esto estaba sucediendo en un lugar tradicionalmente relacionado con la corrupción y la apatía gubernamental.
La proyección fue una experiencia vintage no sólo por la estética del filme, sino porque desde hacía años que en México no se proyectaba una película para tanta gente. Las reacciones del público a las escenas se parecían más a las de un estadio de futbol que a las de una sala cinematográfica. Incluso los silencios eran apabullantes. Pocos silencios tan estremecedores como los que esta noche género Yalitza con esa inocente mirada que ha cautivado al mundo.
Con información de El Financiero.