Tabasco. – Como si se tratara de un héroe y después de seis años en prisión el exgobernador Andrés Granier Melo regresó a Tabasco en medio de un gran recibimiento.
Con globos blancos, retratos en las manos y porras, el exmandatario arribó ayer a una estación de radio después de ser exonerado el pasado ocho de mayo del delito de peculado.
En entrevista, el exgobernador aseguró que nunca hubo quebranto en el estado de Tabasco y subrayó que todo se trató de una venganza política orquestada por el también exmandatario estatal Arturo Núñez Jiménez.
Aunque apuntó que sí hubo problemas en el Sector Salud hacia el final de su gobierno en 2012
Andrés Granier, fue detenido en junio de 2013 en la Ciudad de México por autoridades federales.
Con información de Excélsior