MÉXICO.- Peritos de la Fiscalía de Aguascalientes y de la Dirección de Análisis de Accidentes e Incidentes de Aviación de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes continuaron trabajando en el lugar donde se desplomó el helicóptero «Águila 1», en la zona conurbada del municipio de Jesús María.
Ahora el lugar se encuentra acordonado y bajo vigilancia, algunas personas que presenciaron el accidente señalaron que ellos escucharon detonaciones de armas de fuego, antes y después de que el helicóptero tocara tierra.
Mientras las investigaciones continúan, se realizó un homenaje a los cinco funcionarios de la Secretaría de Seguridad Pública de Aguascalientes, que murieron en el accidente.
En la catedral de Nuestra Señora de Aguascalientes, familiares, amigos, compañeros y autoridades estatales, celebraron una misa de cuerpo presente para pedir por el descanso del Secretario Estatal de Seguridad Pública, Porfirio Javier Sánchez Mendoza, del piloto Olegario Andrade Zamorano, del capitán Víctor Manuel Valdez Sánchez y de los dos artilleros Juan Humberto Rincón Martínez y Alejandro Serafín Guerrero.
El vicario de la Catedral de Nuestra Señora de Aguascalientes, Raúl Sosa, brindó unas palabras de consuelo a los familiares y amigos de las víctimas
«Esposas e hijos, familiares y amigos el dolor que implica esta ruptura de los lazos sensibles en lo humano y aún con ustedes compañeros en el equipo de trabajo que Dios les conceda la fortaleza y las gracias necesarias».
Después de la misa, el cortejo realizó un recorrido de la Basílica al Palacio de Gobierno, donde autoridades, civiles y militares, les rindieron un homenaje.
Ahí, la gobernadora Teresa Jiménez aseguró que los cinco elementos dieron su vida por la seguridad de los habitantes de Aguascalientes y que serán un ejemplo para todos los servidores públicos.
«Demostraron su compromiso con México y por Aguascalientes y para sus compañeros de la Secretaría de Seguridad Pública fueron ejemplo de disciplina, liderazgo, lealtad y preparación constante».
Posteriormente, cada uno de los cuerpos fueron entregados a sus familias para que continúen con sus sepelios, de manera privada.
Con información de N+ / Edgar Tamayo