MUNDO.- Rusia enviará el 20 de febrero una nave Soyuz a la Estación Espacial Internacional (ISS) para traer a la Tierra a tres astronautas, dos rusos y un estadounidense, luego de que la cápsula que debía transportarlos sufriera daños.
La cápsula Soyuz MS-22, actualmente acoplada a la ISS, registró un espectacular escape de líquido refrigerante a mediados de diciembre. Las imágenes mostraban claramente un chorro de partículas que salía de la parte trasera del vehículo.
La agencia espacial rusa (Roscosmos) consideró que el estado del aparato era demasiado incierto para traer a los astronautas rusos Serguéi Prokopiev y Dmitri Petelin y el estadounidense Frank Rubio, y por eso decidió enviar otra nave, el Soyuz MS-23.
La cápsula «será lanzada el 20 de febrero de 2023 sin pasajeros» pero con material, informó Roscosmos en un comunicado. El despegue de esta nave estaba inicialmente previsto el 16 de marzo para llevar a otros tres pasajeros hacia la ISS.
La fecha de regreso de los dos tripulantes rusos y el estadounidense, prevista en un principio para el 28 de marzo, no fue anunciada, pero su misión fue «prolongada», indicó Roscosmos.
La cápsula dañada regresará a Tierra sin pasajeros, según la misma fuente.
Pero la agencia rusa no descarta la posibilidad de utilizar la nave para transportar pasajeros en caso de que se dé «una situación especialmente crítica» a bordo de la ISS.
Actualmente, hay siete personas en la ISS. Sin contar el MS-22 dañado, solo queda un vehículo de rescate, con capacidad para transportar a cuatro personas, en caso de se tenga que llevar a cabo una evacuación.
Una evaluación inicial de las causas de la fuga del líquido refrigerante a mediados de diciembre mencionaba la posibles rupturas causadas por pequeños meteoritos de origen natural, de restos artificiales en órbita o una avería material.
Roscosmos descartó el miércoles cualquier problema mecánico y confirmó que se debía al impacto de un pequeño meteorito. Según la agencia rusa, este golpe causó un agujero de «menos de un milímetro de diámetro» en una tubería de refrigeración.
La ISS es uno de los pocos sectores en los que Rusia y Estados Unidos todavía cooperan, tras el inicio de la ofensiva rusa en Ucrania, el 24 de febrero, y las sanciones occidentales que le siguieron.
Con información de AFP