LOS ÁNGELES, CALIFORNIA.- La casa Sotheby’s exhibe en Los Ángeles una muestra de la subasta que realizará el 4 de octubre con más de 300 objetos que pertenecieron al actor Robin Williams y su esposa, Marsha; una colección que ofrece una mirada íntima a la vida familiar del célebre artista, fallecido en 2014.
«Lo que es excitante e interesante es que se trata de objetos que la familia escogió y con los que crecieron en su hogar», dijo Nina del Río, vicepresidenta de Sotheby’s, sobre esta colección titulada «Creating a Stage: The Collection of Marsha and Robin Williams».
«Esta muestra ofrece una mirada íntima a la vida familiar de Robin Williams frente a la imagen pública que creó a través de su carrera», señaló Del Río mientras mostraba uno de los grandes atractivos de la subasta: un cuadro de Banksy titulado «Happy Choppers», realizado en 2006, que podría alcanzar un precio de 600 mil dólares.
«Este cuadro aborda temas que interesaban personalmente a Williams y recuerda a su trabajo en ‘Good Morning Vietnam’ (1987)», sostuvo Del Río en alusión a este filme de Barry Levinson por el que el actor fue nominado al Oscar.
El cuadro fue un regalo de Marsha, productora de cine y filántropa con la que Williams estuvo casado durante 20 años, por lo que posee un «grandísimo valor personal», señaló Del Río.
Fue la propia viuda quien, junto a sus hijos, decidió poner en marcha la subasta, que se celebrará en Nueva York, cuya recaudación —se estima una cifra de entre 3,3 y 4,7 millones de dólares— irá a parar en parte a organizaciones benéficas.
Marsha «siente que es el momento ideal para rendirle homenaje y, a la vez, seguir adelante con sus vidas», comentó Del Río.
Entre los objetos a subasta hay una gran colección de recuerdos cinematográficos relacionados con la carrera de Williams, como sus Globos de Oro por Mork and Mindy, Good Morning Vietnam, The Fisher King y Mrs. Doubtfire (valorados en unos 20 mil dólares cada uno).
También se podrá adquirir el puñal que empleó en Hook y un cuadro que aparecía en una de las escenas clave de Good Will Hunting, pintado por el director de la propia película, Gus Van Sant.
Por decisión de Marsha y los hijos de Williams, parte de los beneficios de la subasta serán donados a Human Rights Watch, la Fundación Christopher y Dana Reeve, el Hospital Infantil de Investigación St. Jude’s y Wounded Warrior Project.
Con los fondos también se establecerá la Fundación Robin Williams, que concederá becas para estudiar en la prestigiosa escuela de artes Juilliard de Nueva York.
Redacción / Agencia AP