MÉXICO.- Dirigentes campesinos, quienes protestan desde hace una semana en la Cámara de Diputados, llegaron al Zócalo donde se desarrolla el desfile de la Revolución Mexicana; sin embargo, intentaron tirar las vallas metálicas que resguardan la Plaza de la Constitución.
«Comentar que en este momento ya parte de la diligencia se trasladó a la zona del desfile para presenciarlo, es lo que nos comentan, pero la mayoría de los campesinos que siguen en la Cámara de Diputados se encuentran ahí», dijo el subsecretario de Gobierno capitalino, Arturo Medina en entrevista para Milenio.
Entre los manifestantes se encuentran líderes de las organizaciones campesinas del Frente Auténtico del Campo (FAC), Coalición de Organizaciones Democráticas Urbanas y Campesinas (CODUC) y la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA).
Los dirigentes caminaron acompañados por un grupo de campesinos desde avenida Congreso de la Unión para mostrar su inconformidad al cerco policiaco que se instaló en la Cámara de Diputados para que no marcharan.
«El diálogo será nuestra herramienta»
De acuerdo con el funcionario, el gobierno capitalino mantendrá en todo momento el diálogo, toda vez que algunas personas irrumpan o cometan actos de vandalismo en el acto cívico.
«Vamos a estar muy pendientes de que no haya personas que alteren el orden y también hay autoridades federales que están participando en el desfile, pero si alguien llegara a oponerse nuestra posición será el diálogo, el diálogo será nuestra herramienta», añadió.
En un comunicado, el gobierno local pidió a los campesinos «actuar con prudencia y evitar confrontaciones con quienes participan en el acto conmemorativo de este día”.
Aseguró que se busca «evitar complicaciones o algún riesgo por el desplazamiento de integrantes de organizaciones campesinas”.
Ayer los campesinos amagaron con irrumpir el desfile del 20 de noviembre, como protesta para que se cumplan sus exigencias.
Exigen que se respete la propuesta que hizo la Comisión de Agricultura sobre la petición de recursos por 24 mil millones de pesos; así como mayor presupuesto al Instituto Nacional de Pueblos Indígenas, a caminos rurales y a programas para mujeres del campo.
Con información de Milenio / Foto: César Velázquez