México. – En el marco del 53 aniversario del Plan DN-III-E, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) realizó ayer un simulacro de sismo magnitud 8.0, con epicentro en el estado de Morelos.
Unos 120 elementos del Equipo de Rescate Urbano participaron en el ejercicio, en el que exhibieron sus habilidades de búsqueda en estructuras colapsadas y de remoción de escombros, así como en la atención a víctimas, en el Hospital General de Zona de la dependencia. Al activarse el simulacro, los militares se concentraron en un punto del Campo Militar 1-A, cercano al hospital, donde instalaron el puesto de mando y comenzaron la búsqueda en una estructura colapsada, rescatando a una supuesta víctima de entre los escombros.
El Equipo de Rescate Urbano, compuesto por grupos de seguridad, búsqueda y rescate, emergencias, binomios caninos, medicina táctica y equipo de remoción de escombros, utilizó herramientas y aparatos de alta tecnología en la aplicación del protocolo para garantizar el auxilio a la población.
“Durante estos 53 años que el día de hoy [ayer] estamos conmemorando, el 10 de octubre de 1966, hemos tenido la oportunidad de proporcionar el apoyo a la población civil en caso de desastres a través del Plan DNIII-E en sus tres fases: prevención, auxilio y recuperación”, destacó el jefe de la subsección de Protección Civil del Estado Mayor de la Defensa, Juan José Montiel Maldonado.
“Con estos mismos procedimientos, hemos tenido la oportunidad de salir al extranjero bajo el concepto de ayuda humanitaria, en un esquema bilateral, y nos hemos desplegado en 43 ocasiones para auxiliar a 20 países”, indicó.
Los binomios caninos forman parte del Equipo de Rescate Urbano, compuesto también por grupos de seguridad, búsqueda y rescate. El coronel de infantería explicó que la fase de prevención del Plan DN-III-E consiste en el adiestramiento permanente de las tropas en materia de protección civil y administración de zonas de desastre, en las cuales se realiza una importante difusión para alertar a la población que se podría ver afectada por una catástrofe.
En la fase de auxilio, detalló, se movilizan elementos y material para apoyo a la población afectada; se delimita la zona de desastre, dividiéndola en áreas de operaciones; se realiza la evacuación de los afectados a albergues o refugios temporales y se establecen cocinas comunitarias para preparar y distribuir comida caliente. Indicó que en la fase de recuperación se identifican los trabajos para reactivar los servicios básicos (agua y electricidad), se entregan despensas y medios de supervivencia y se continúa con el despeje de vías de comunicación.
“Vamos empleando nuestros conocimientos en materia de adiestramiento. Este concepto del Plan DN-III-E lo podemos aprender nosotros en el Sistema Educativo Militar, en el Sistema de Adiestramiento, para actuar en todo tipo de desastres”, dijo.
Montiel Maldonado mencionó que en los últimos 10 meses más de 33 mil efectivos militares fueron desplegados en todo el país para atender mil 16 emergencias, principalmente incendios forestales e inundaciones por huracanes y tormentas tropicales.
Con información de El Universal.