México. – La sección 22 encabeza las negociaciones con el gobierno y quiere que las propuestas del plan estatal se consideren en el sistema nacional.
Las negociaciones del dictamen de la reforma educativa con las autoridades federales las ha encabezado la sección 22 de la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE), que no solo busca su pleno reconocimiento como trabajadores del Estado en el apartado B del artículo 123 constitucional, sino que las propuestas del Plan para la Transformación de la Educación en Oaxaca (PTEO) se consideren en el sistema nacional.
La mayoría de los mil 500 profesores del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación (SNTE), adheridos a la CNTE, quienes se mantuvieron en plantón afuera de la Cámara de Diputados, provenían de Oaxaca; una minoría era de la sección 7 de Chiapas, de la 18 de Michoacán y de la 9 de Ciudad de México. Pero solo 17 integrantes de la comisión política del magisterio oaxaqueño y algunos otros miembros del equipo jurídico de la organización sindical participaron ayer en la reunión con los secretarios de Educación Pública, Esteban Moctezuma, y de Gobernación, Olga Sánchez Cordero.
Así como en 2013, al inicio de la reforma educativa, trataron de impulsar el PTEO, ahora el magisterio disidente de Oaxaca vuelve a exigir que los planteamientos de su plan se plasmen en la nueva modificación constitucional. Eloy Martínez, secretario general de la sección 22, anticipó que las movilizaciones no terminarán hasta que sus proyectos educativos sean considerados, entre ellos que la construcción de los programas educativos sea de manera comunitaria y alejada de políticas neoliberales.
El PTEO establece cuatro principios para orientar la educación: que sea democrática, nacionalista, humanista y bajo “comunalidad”, incluir la cosmovisión de la comunidad como forma de vida y razón de los pueblos indígenas. En cuanto a la evaluación docente, el PTEO establece que se realizará un diagnóstico participativo basado en colectivos que tomarán en cuenta la autoevaluación (una autocrítica de la participación de los actores en el mismo proceso educativo); la coevaluación (una valoración de los participantes desde la mirada de otros involucrados en el mismo proceso); la heteroevaluación (aquella que realiza una persona sobre otra respecto de su trabajo); la evaluación externa (que realiza una instancia distinta al colectivo que diseñó y ejecutó el proyecto), y la metaevaluación (calificar la misma evaluación).
“Son planteamientos con los que ya hemos comenzado a trabajar en Oaxaca y se trata de hacer propuestas a nivel nacional que consideren estas formas de evaluación, y que no olvidemos que estamos en un país multicultural en el que cada una de las regiones tiene sus propias problemáticas”, explicó Carlos Castro, de la comisión de educación de la sección 22.
Sobre la capacitación de docentes, el plan mandata articular a las instituciones formadoras de docentes con la finalidad de diseñar e implementar planes y programas de preparación permanente “desde las perspectivas emancipadoras críticas”.
Tras levantar el plantón que desde el miércoles pasado montaron frente a la Cámara de Diputados, Eloy López Hernández, dirigente de la sección 22, advirtió que se mantienen en “alerta máxima” hasta conocer el dictamen final de la reforma educativa. El movimiento magisterial descalificó la totalidad de la reforma educativa que actualmente se discute en las comisiones de Educación y Puntos Constitucionales.
Pasadas las cuatro de la tarde, los maestros comenzaron a levantar el bloqueo en las afueras de San Lázaro y el líder sindical señaló que cuando esté listo el dictamen final y en caso de que no se consideren sus peticiones, definirán sus acciones.
Con información de Milenio.
